El placer que da a los sentidos disfrutar de un alimento rebozado y frito, es la principal razón para que a muchos les cueste hacer dieta; la combinación de texturas crujientes y suaves en un solo bocado, ha hecho de las preparaciones rebozadas una de las favoritas para llevar a la mesa. Una de las formas de rebozar que existen es la tempura, y esta combina de la mejor manera, lo crujiente y lo ligero a la vez.
Hoy te traigo algunos trucos que quizás no conoces, y que harán de tu tempura una preparación sin igual. Sin embargo, antes de pasar a contarte, veamos un poco mejor de qué se trata esta técnica que es la favorita de muchos hogares en el mundo.
9Utiliza abundante aceite
Como sucede en los requisitos para muchas técnicas de fritura, el aceite debe ser abundante y encontrarse a una temperatura alta, entre 180 y 200 ° C estará perfecto. Los mejores aceites para freír la tempura es el de girasol, oliva suave o de sésamo.
Cuando estés haciendo la masa, ten la sartén con el aceite ganando temperatura y los alimentos que vayas a freír cortados. La masa no debe reposar y todo será un proceso muy rápido.