Las croquetas son una de las elaboraciones más populares y más extendidas de la gastronomía española. Raro es el bar o restaurante que no las ofrece en su carta. Pero, algunas veces nos encontramos con un resultado decepcionante, y es que, las croquetas están deliciosas, pero hay que saber hacerlas.
Hay algunos conceptos que hay que respetar durante la receta, que muchas veces es ninguneado por su cocinero. No hay cosa que de más rabia que encontrarse con una croqueta fofa, o poco cremosa por dentro, en el siguiente artículo te explicamos cuáles son los secretos de una croqueta casera propia de los restaurantes con estrella Michelin.
9Leche entera
En este punto de la receta, al hablar de la bechamel, es vital mencionar la leche. Y es que, claro, no nos damos cuenta, pero el sabor de la bechamel tiene mucho que ver con la calidad de nuestra leche.
No solo la calidad, sino su tipo. Para que la bechamel tenga todo el sabor necesario, debemos de utilizar leche entera. Otra variante va a difuminar la potencia del lácteo y la croqueta brillará por los otros ingredientes, no por el que más presencia debería de tener.