El acceso a Internet ha sido siempre por líneas fijas (cobre o fibra) o por redes móviles (como el 4G). También están otras como la banda ancha inalámbrica o conexiones vía satélite como Starlink.
Sin embargo estas han tenido gran cantidad de problemas de cobertura, velocidad y de latencia, ya que cada vez hay menos satélites que sirven para operar y por la forma de la orientación de las antenas. A pesar de ello, con la llegada de la red de satélites SpaceX esto cambió en 2020.
4Operarán en diferentes órbitas
Los 12.000 satélites están planeados que operen en órbitas distintas: 1.584 de ellos estarán a 550 kilómetros de altura en 22 planos orbitales distintos, 2.800 estarán a 1.150 kilómetros operando en las bandas Ku (12-18 Ghz) y Ka (26,5-40 GHz) en órbitas no geoestacionarias (NGSO), y los 7.500 restantes estarán operando s 340 kilómetros de altura en la banda V (40-75 GHz). Una órbita conocida como Very-Low Earth Orbit (VLEO).
Los satélites que tienen Internet se encuentran en órbitas geoestacionarias como también los que ofrecen la televisión por satélite. Esto significa que llevan la misma velocidad que la rotación de la Tierra y siempre se mantienen en un punto del cielo. Pero los satélites de Starlink se mueven más rápido y por ello es necesario un receptor que Oriente continuamente la señal a donde se encuentren los satélites.