Liderados por la Fundación Pasqual Maragall, entidades y expertos han pedido, marco del Día Mundial del Alzheimer que se celebra este 21 de septiembre, impulsar la investigación como única vía para vencer la enfermedad, y más recursos para mejorar la calidad de vida de las personas afectadas, sus familiares y sus cuidadores.
En el acto ‘Los retos del Alzheimer y las demencias’, impulsado por la Fundación Pasqual Maragall junto a la Sociedad Española de Neurología (SEN), la Confederación Española de Alzheimer (CEAFA), la Fundación Matia y HelpAge, la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, ha sido la encargada de inaugurar el acto, que también ha contado con los testimonios de una persona recién diagnosticada, dos familiares cuidadores y un participante en estudios de investigación.
«El Alzheimer es una epidemia silenciosa y estructural que solo encontrará respuestas definitivas mediante la ciencia y la investigación. Expertos y entidades nos hemos unido hoy aquí para reclamar la atención política que esta realidad merece. Porque está en nuestras manos evitar que el Alzheimer ponga en peligro nuestro sistema sanitario y asistencial», ha recordado Cristina Maragall, presidenta de la Fundación Pasqual Maragall.
En la actualidad, más de 900.000 personas en España padecen demencia, el 75% de los casos a causa del Alzheimer. Esto son una de cada 10 personas de más de 65 años, y un tercio de las mayores de 85. Con la esperanza de vida en aumento, y si no se halla un tratamiento que modifique su curso, el número de casos podría duplicarse en 2050.
La doctora Raquel Sánchez Valle, jefa del Servicio de Neurología del Hospital Clínic de Barcelona y Secretaria del Grupo de Estudio de Conducta y Demencias de la Sociedad Española de Neurología (SEN), ha reclamado una dotación presupuestaria adecuada para el Plan Nacional de Alzheimer.
«En enfermedades graves como las neurodegenerativas, el diagnóstico precoz es clave para mejorar la calidad de vida de las personas afectadas y reducir costes. Tenemos las herramientas probadas y aprobadas desde hace años, pero solo una minoría de centros en España y, por lo tanto, una minoría de pacientes, tienen acceso a ellas. Necesitamos que el Plan Nacional de Alzheimer garantice este acceso a toda la población», ha reivindicado.
Los costes sanitarios y sociales de las enfermedades neurodegenerativas también son extraordinariamente elevados. Una estimación conservadora los sitúa en 21.000 millones de euros anuales, 24.000€ por persona afectada al año, cuyo 87% asumen directamente sus familias. A estos costes económicos hay que añadirles los personales, sociales, psicológicos y laborales que padecen los familiares cuidadores, cuya situación tampoco recibe la consideración que merece.
Por su parte, Ainhoa Etayo, miembro del Área de Atención Asociativa de CEAFA, ha comentado que «el diagnóstico precoz y certero es el reto más urgente, pues es la base para poder desplegar todas las actuaciones y recursos sociales y sanitarios que garanticen el cumplimiento de los derechos y garantías de todas las personas afectadas por demencia, y esto incluye a los familiares cuidadores».