Las berenjenas son unas de las hortalizas más versátiles en la cocina. Con ellas es posible la preparación de los más diversos platillos y a su vez resultan ligeras, saludables y económicas.
Al tener un alto contenido de agua y al poseer una textura que absorbe los sabores y líquidos muy bien, hay algo que muchas veces resulta desagradable al prepararlas especialmente fritas, pues estas tienden a empaparse en grandes cantidades de aceite y terminan quedando muy grasosas. Te voy a presentar algunos trucos para que al prepararlas resulten sin un gramo de grasa.
2Cómo obtener resultados crujientes al freír
Para obtener resultados crujientes es necesario tener en cuenta varios aspectos, por un lado la temperatura del aceite, la cantidad de piezas a freír y la utilización de un enharinado previo para una mejor textura final.
La cantidad de aceite debe ser abundante y la temperatura del mismo debe rondar los 175 a 180º C. Freír en pequeñas cantidades también es necesario, de esta manera se evitan las fluctuaciones de temperatura que afectan el resultado. Y en caso de desear texturas muy crujientes, enharinar con harina maicena o panko, es necesario para un resultado ultra crocante.