- Patata, verdura, mayonesa… los ingredientes de la ensaladilla rusa están bien definidos, pero siempre dan lugar a la innovación.
- Aquí te presentamos la ruta imprescindible para poder degustar las mejores de Madrid.
La ensaladilla rusa se remonta a 1860, cuando el chef belga Lucien Oliver abrió, en Moscú, un restaurante de haute-cuisine para el disfrute de la alta burguesía zarista: L’Ermitage. Pronto, desembarcó en España, tanto es así que se ha convertido en un plato imprescindible para cualquier restaurante que se precie.
Cada uno tiene su estilo, y hay tantas ensaladillas como gustos. Sin embargo, como sabemos que no todas están igual de ricas, aquí te proponemos una ruta para que disfrutes de una ensaladilla rusa de las de verdad.
CANDELA RESTAURANTE
Candela Restaurante se ha consolidado como un punto de referencia para los amantes de la gastronomía en el barrio de Chamartín. Su carta, cuidada y con ingredientes de calidad, es siempre una auténtica delicia. En ella, podemos encontrar desde platos para compartir y picar en la barra hasta propuestas más ‘de cuchara’, de esas que requieren sentarse en buena compañía para disfrutarlas con calma y sin agobios. Para ir abriendo boca, se puede optar una ensaladilla rusa con langostinos, cuya mayonesa es sencillamente espectacular; unas clásicas croquetas de jamón, que se deshacen en la boca en una fusión perfecta entre el crujiente del rebozado y la cremosidad del interior; o una tortilla de patata, al estilo de Betanzos, jugosa y en su punto.
CASA ORELLANA
En Casa Orellana, el chef sevillano Guillermo Salazar interpreta la tradición y el sabor castizo a través de una carta llena de deliciosas raciones y guisos, acompañados de cañas, vermuts y una cuidada selección de vinos que cuenta con caprichos y botellas de la casa. La carta de este local la conforman elaboraciones populares y creaciones del chef sevillano que surgen de la fusión de su experiencia personal con los recetarios de siempre. Así surgen dos versiones de ensaladilla rusa, con atun en escabeche casero y con centollo, ambas deliciosas y perfectas para un aperitivo o un picoteo a cualquier hora.
CAFÉ COMERCIAL
Historia viva de la vida cultural madrileña que, tras un lavado de cara, se presenta ahora como un espacio donde poder comer, tapear y beber, manteniendo siempre la esencia castiza que lo caracteriza. Indispensables sus bravas. Entre los clasicos de la carta del Café Comercial encontramos esta ensaladilla clásica ‘El Comercial’ a la que se le añaden gambas al ajillo.
BIBO
La democratización de la alta cocina en estado puro. Disfrutar del recetario andaluz con muchos guiños cosmopolitas motivados por los viajes de Dani García alrededor del mundo es un plan perfecto para disfrutar con amigos y familia. La ensaladilla rusa con huevitos fritos de codorniz es por derecho uno de los clásicos de las tapas del restaurante BIBO de Dani Garcia. Elaborada como la clásica andaluza donde la patata se machaca, esta versión se elabora con AOVE mayo, ventresca de atún y el toque de los huevitos fritos de codorniz al ajillo.
FLORIDA RETIRO
Un conjunto de espacios gastronómicos ubicados en pleno pulmón de Madrid donde se pueden organizar planes de ocio para todos los gustos. Los comensales pueden disfrutar de la oferta de platos de Florida Retiro, diseñada por el chef Iván Cerdeño, en Los Kioskos, la zona más informal con diferentes puestos de comida que se ha adaptado a esta nueva situación con una nueva disposición de mesas y asientos, en La Galería, un espacio “tapas-bar” acogedor, luminoso y semi abierto al parque, en el restaurante El Pabellón, y en la terraza de El Pabellón, denominada Jardín Sur. En su carta, Florida Retiro ofrece su versión de la ensaladilla rusa ahumada, una elaboración casera a base de patata, huevo, pepinillo y… algo que no deja indiferente a nadie.
LA GRAN FAMILIA MEDITERRÁNEA
Dani García ha puesto en marcha un nuevo proyecto muy especial y como nunca se había visto antes. Se trata de La Gran Familia Mediterránea, un nuevo concepto de comida a domicilio que une los gustos de todos los miembros de la “familia”, para poder disfrutar, una vez más, juntos y sin discusiones de la buena comida con el sello del chef malagueño Dani García. Desde comida asiática, bocatas gourmet, cocina española o italiana hasta opciones saludables o un cocktail bar en casa. Así ofrece dos versiones de ensaladilla rusa haciendo un guiño a las recetas que ofrece en Lobito de Mar y BIBO.
LOBITO DE MAR
Tras el éxito de este chiringuito sin playa en Marbella, en verano de 2019 la influencia marinera llegó a Madrid con la apertura de Lobito de Mar en el número 10 de la emblemática calle gastronómica Jorge Juan. Lobito de Mar Madrid abrió sus puertas como una evolución de su primer local en Marbella. Una propuesta muy centrada en el producto del mar, espetos y arroces que inundará la calle Jorge Juan con sus recetas más marineras. Este nuevo proyecto trasladará el aroma, aire y producto del mar andaluz a la capital en su formato más resalao. La receta de la ensaladilla rusa de Lobito de Mar sorprende y es que en lugar de acompañarla de gambas como la ensaladilla andaluza la acompaña de anguila ahumada.
SA BRISA
Desde su apertura, Sa Brisa ha sabido hacerse hueco como referente de la gastronomía ibicenca en la capital. La versatilidad de la cocina de Sa Brisa se evidencia en cada uno de sus platos en los que, de forma muy original, fusiona productos cotidianos con toques experimentales e innovadores. Un ejemplo de ello es la ensaladilla rusa de bonito fresco, que se sirve con yema de huevo gélida y cuero de trigo de Salamanca. Una propuesta única que conquista al comensal por su sabor y su original presentación ya que se sirve en el interior de una matrioshka payesa y ahora también se puede disfrutar para llevar.
NUEVO GERARDO
Nuevo Gerardo es el restaurante de Grupo Oter que nacía hace más de 25 años en el barrio de Chamartín y se erige sobre dos pilares básicos: la mejor materia prima y el cariño en la cocina. Su propuesta gastronómica, a cargo del chef José Antonio García – al mando de sus fogones desde 2009 -, se mantiene fiel a su filosofía de traer lo mejor del litoral mediterráneo a Madrid. Mariscos, pescados, pulpos, arroces y los mejores cortes de carne se convierten así en los protagonistas de una cocina que apuesta por el recetario tradicional. Su ensaladilla rusa tradicional de bonito de campaña es perfecta para compartirla en buena compañía tanto en cualquiera de los diferentes espacios de su sala como desde su barra. El secreto de su inconfundible sabor se debe a que José Antonio García apuesta por potenciar su sabor incorporando lubina escabechada en la receta.
PEZ FUEGO
Ubicado en el corazón financiero de Madrid, Pez Fuego es la apuesta gastronómica de Grupo Oter que ha revolucionado la oferta de brasas en la capital. Cocina del mar con especial atención a la materia prima, base de una experiencia culinaria para disfrutar en un amplio espacio dividido en distintos ambientes: la barra con vistas a la parrilla, una zona lounge, la sala del restaurante, salón privado y una terraza adaptada a la temporada de invierno y verano. Su propuesta de ensaladilla rusa es muy especial ya que apuesta por la merluza en escabeche. La base de la ensaladilla lleva zanahoria, huevo cocido, patata, guisantes, bonito, mahonesa y el jugo de media lima. Para su elaboración el chef del restaurante, Francisco Martínez Sarabia, elabora el escabeche con la merluza y lo deja enfriar. Este escabeche se prepara a base de ajo, cebolla, aceite, laurel, albahaca y cavo, vino blanco, vinagre de Jerez y merluza. Posteriormente se prepara la ensaladilla y se agrega un poco de escabeche.
TREZE
En la barra de Treze, una de las más cotizadas de la capital, Saúl ofrece un exquisito repertorio de tapas y raciones en un espacio más amplio y sofisticado, entre las que no pueden faltar sus bocados más icónicos, como las croquetas, los torreznos o el famoso duelo de ensaladillas, Elena vs Saúl. La de Elena Ursu, su mujer, lleva base de patata, zanahoria y guisante a la que añade mostaza dulce, pepinillo agridulce y embutido alemán, y la termina con yema y clara cocidas y pimiento de piquillo; mientras que la de Saúl, utiliza la misma base pero incorpora Ventresca de bonito, aceitunas, huevas de arranque y trufa.