La Unidad Militar de Emergencias (UME) mantiene desplegados más de un centenar de efectivos que trabajan en las tareas de extinción del incendio de Ribas de Sil (Lugo), el primer gran fuego forestal registrado en esta campaña en Galicia y que arrasa 900 hectáreas.
Según ha trasladado la Delegación del Gobierno en Galicia, la UME mantiene desplegados 137 efectivos y 56 vehículos para participar en la extinción del incendio de Ribas de Sil (Lugo). Estos medios proceden del equipo de intervención activo durante el verano en la Base General Morillo en Pontevedra y de la Base Conde de Gazola de León.
En concreto, estos profesionales han participado en las tareas de extinción con un subgrupo con dos secciones de intervención, un núcleo de apoyo operativo con Policía Militar, un equipo de máquinas y una unidad de apoyo logístico. Asimismo, se ha desplegado un oficial de enlace al Centro de Coordinación Central de la Xunta.
El puesto de mando avanzado se ha establecido en Margaride de Lor, en Quiroga (Lugo), y la base logística se ha situado en un polideportivo de Quiroga del mismo municipio.
De este modo, en las últimas horas, la UME ha trabajado en la defensa de Interaz Urbano-Forestal en Carballo de Lor y Pozos, y ha utilizado fuego técnico en flanco oeste, evitando que las llamas sobrepasaran la LU-933. También ha optado por este mecanismo y un ataque directo con autobomba para defender la zona de O Pacio y Beirán y otro con apoyo de maquinaria en la cabeza del incendio, al sur de la localidad de Salcedo.
Además, la subdelegada del Gobierno en Lugo, Isabel Rodríguez, se desplazará de nuevo en la mañana de este martes a la zona para supervisar el dispositivo.