A veces pensamos en los daños que puede causar el cloro de las piscinas mal mantenidas, donde los niveles del mismo no son los más adecuados.
Indudablemente que un desequilibrio entre ambos pH puede causar efectos negativos, por eso debes conocer cómo bajar el cloro de la piscina. ¿Pero cuáles son? ¿Y se pueden prevenir?, pues te invitamos a que sigas leyendo y te enteres, así también como de la historia del cloro
Para que, entonces, puedas saber si debes estar tranquilo o no, seguir dándote un chapuzón, que es lo que más se desea cuando las olas de calor agobian en esta época del año.
5¿Dónde se aplica y uso el cloro?
- Producción de insumos industriales y para consumo: se usa para producir muchas productos industriales y de consumo, por ejemplo, para elaborar plásticos, solventes para lavado en seco y desgrasado de metales, producción de agroquímicos y fármacos, insecticidas, colorantes y tintes.
- Purificar y desinfectar: con el cloro se purifica el agua, como en las plantas de tratamiento de agua, en desinfectantes, y en la lejía; el uso del mismo en el agua tiene el poder tres veces más que otro agente para desinfectar contra Escherichia coli. Su concentración es más efectiva, que su equivalente al bromo, y más de seis veces más que el yodo.
- Como antiséptico: fue introducido en 1835 por Holmes, en Boston y luego en 1847 por Semmelweis en Viena, para usar en mobiliarios, equipos, instrumental y áreas hospitalarias. Además, en forma de ácido hipocloroso para eliminar bacterias, hongos, parásitos y virus en los suministros de agua potable, de allí el uso del cloro de la piscina.
Aunque muchas piscinas privadas no usan en si el cloro sino hipoclorito de sodio, combinación de cloro e hidróxido de sodio e incluso tabletas sólidas de isocianuratos clorados.
Esto se hace rutinariamente en los depósitos de agua, en pequeñas cantidades el cloro de la piscina o sistemas de agua industrial, los átomos de cloro son hidrolizados del resto.
Esto da origen al ácido hipocloroso (HClO), que actúa como un biocida general, que elimina gérmenes, microorganismos, algas, entre otros. El cloro también es utilizado como detergente contra el Bacillus repridentius o el Martelianus marticus, que son bacterias.