Cuando se produce el cobro de facturas impagadas, alquileres con retraso, préstamos y otras deudas que no logran ser resueltas mediante acuerdos amistosos, existe un recurso amparado por la Ley de Enjuiciamiento Civil para que los acreedores puedan recuperar su capital, solicitando la acreditación de la deuda por la vía judicial.
Este recurso se denomina proceso monitorio y su correcta aplicación depende de la asesoría de un excelente equipo de profesionales como el que ofrece una de las empresas de recobro referentes en España, Cobratis.
Con una efectiva y ágil plataforma online, la empresa especializada en el cobro de todo tipo de impagos ocurridos dentro del territorio español garantiza la recuperación de dinero que se creía perdido mediante un efectivo sistema de bajo coste.
¿Cómo se inicia un proceso monitorio con Cobratis?
Mediante la aplicación de su tarifa estándar, para una sola deuda pendiente, o su tarifa plana mensual, si el cliente posee varios casos no resueltos, los expertos de Cobratis aseguran el éxito en las negociaciones, con intentos en primera instancia por la vía amistosa o extra judicial o, en caso de no darse un acuerdo, a través del inicio del proceso monitorio, que cada vez adquiere más auge en el país.
Al consultar la web de este despacho multidisciplinar, los usuarios deben llenar un formulario con las características de su deuda. El servicio puede ser contratado por particulares, empresas, comunidades de vecinos y autónomos.
A partir del conocimiento de los datos, los abogados de la empresa se tomarán un tiempo aproximado de 20 días para intentar acuerdos extrajudiciales con el o los deudores y, si existe negación o resistencia en esta fase, optarán por llevar el caso ante un juzgado.
El proceso monitorio se inicia con la presentación que debe hacer el acreedor de la deuda que desea cobrar, con respaldo en documentación probatoria del saldo pendiente, como facturas, recibos de entregas, contratos, o cualquier otro aval físico del registro del crédito.
Si no se logra la entrega del dinero, comenzará la fase de cobro forzoso de la deuda durante la cual la persona debe alegar sus razones de oposición al pago, lo que genera el inicio de la oposición a la demanda. Cubiertas estas fases, la reclamación por proceso monitorio se resolverá mediante un juicio verbal si la deuda no supera los 3.000 euros, o un juicio ordinario, cuando la cantidad es mayor.
Asesoría integral para el éxito en las gestiones
En manos de este equipo de expertos, los clientes estarán respaldados por el cobro más fiable, rápido y económico del mercado. En el caso del proceso monitorio, Cobratis solo aplicará el 3,5% sobre el total reclamado para su tramitación en caso de que el cliente esté suscrito a la tarifa general; y sin coste alguno para quienes hayan elegido la tarifa plana.
Como compañía líder en recuperación de impagados, Cobratis se compromete con la solución transparente y eficaz de cada caso, con la tasa de efectividad más elevada del mercado y la confianza que le han dado más de 14 años de experiencia ofreciendo tranquilidad a los acreedores, independientemente de la cantidad o la condición de la deuda.