Los mejillones son de esas delicias marinas que son imprescindibles en los menús gastronómicos de las zonas costeras de España. Cuando son preparados de la manera correcta, dan pie a las mejores creaciones culinarias, tales como los famosos tigres mejillón de Alberto Chicote antes de utilizarlos para alguna preparación, lo más recomendable siempre es someterlos a una primera cocción que de hecho permitirá determinar la frescura y óptimo estado de cada uno de ellos.
Si deseas saber cuál es la cantidad de agua que debes emplear para cocerlos de manera perfecta, tienes que seguir hasta el final, porque aparte de contarte sobre eso, también te daré unos consejos que harán de tus mejillones todo un plato ‘10’.
Todo lo que debes saber antes de cocer los mejillones
Si bien en la actualidad es posible conseguir los mejillones congelados en perfecto estado, lo mejor es siempre optar por comprarlos bien frescos. Unos mejillones en perfecto estado huelen a mar; por esta razón, si un mejillón tiene un olor desagradable, lo mejor será desecharlo de inmediato.
El tamaño también cuenta, los mejores son aquellos de tamaño grande, pues garantizan una buena cantidad de carne en su interior. Esto es clave para el éxito de una receta, ya que si es de tamaño muy pequeño, al cocinarse puede tender a encogerse, lo que no lo hará para nada apetecible.
Escoge los mejillones de concha negra y bonita, aquellos que luzcan de otros colores o con concha rota, es mejor que los evites. Del mismo modo que comprarlos frescos es importante, consumirlos frescos también lo es. Es mejor que los compres el mismo día que los vas a preparar o a lo sumo un día antes.
En caso de no prepararlos el mismo día, te aconsejo tomar un paño y humedecerlo con suficiente agua con sal gruesa, escúrrelo y envuelve los mejillones en el mismo, conservándolos en la zona menos fría de la nevera.
Límpialos de forma correcta antes de cocerlos
La forma más eficaz de limpiar los mejillones, es colocarlos en un escurridor y lavarlos con agua fría directamente bajo el grifo. Estos moluscos no contienen arena en su interior; sin embargo, pueden tener algas pegadas en su superficie e incluso algunas conchas. Mientras los lavas, fíjate bien en si alguno de ellos está abierto; de ser así, golpéalo suavemente contra la mesa y si no se cierra, deséchalo inmediatamente.
Cuando ya los tengas limpios, corta las barbas con la ayuda de una tijera y ráspalos con un cuchillo. Este procedimiento debes hacerlo con suavidad para evitar que se rompa la concha. Llévalos de regreso bajo el grifo y termina de limpiarlos bien enjuagando cada uno suavemente con tus manos.
¿Debo cocer los mejillones en agua?
Quizás muchas veces te preguntes si es una buena idea cocer los mejillones en el agua; sin embargo, la respuesta es: no. Cocerlos dentro de una gran cantidad de agua nunca será la mejor opción, pues su sabor apenas se abran se diluirá en el agua. Además, un mejillón hervido, pierde las propiedades de su carne y su textura.
En caso de que pienses utilizarlos en tu receta más adelante, lo mejor que puedes hacer es cocinarlos utilizando la técnica al vapor y congelarlos con el líquido resultante de la cocción, misma que te servirá para calentarlos más adelante. En caso de congelarlos, no los tengas por más de un par de semanas. Lo mejor es consumirlos lo más fresco que se pueda.
La cantidad justa de agua que debes poner para cocerlos, el truco para un resultado ‘10’
Cuando hablamos de cocer los mejillones, se trata de dejarlos solo el tiempo suficiente para que se abran. Por lo general esto sucede en unos 3 o 4 minutos. Siempre que los vayas a cocer, procura utilizar una olla profunda, de manera tal que quepan todos perfectamente después de abiertos.
Para prepararlos, es necesario añadir una cantidad de agua; no obstante, tal como te comentaba, no debe ser una cantidad excesiva de esta. Los mejillones deben abrirse con el vapor resultante, no sumergidos en ella. Coloca apenas uno o dos dedos de agua en el fondo de la olla y llévala a fuego alto, cuando el fondo comience a emanar calor vierte en ella los mejillones y disminuye el fuego.
Coloca la tapa a la olla y levántala transcurridos un par de minutos si ya se han abierto, déjalos un par de minutos más y retíralos. Es muy importante que deseches aquellos que no se llegaron a abrir.
Consejos para unos mejillones perfectos
Para que los mejillones queden con un aroma tremendo, puedes incorporar en el fondo de la olla unas hierbas de tu elección, una hoja de laurel los aromatiza de manera fantástica y unas rodajas de limón harán de ellos todo un manjar. Si tienes la posibilidad, te recomiendo también realizar la cocción utilizando en lugar de agua, vino blanco de buena calidad, el aroma será de impacto.
Cuida de cerca el tiempo de cocción, que será de un tiempo aproximado de 6 minutos, 3 minutos antes de abrirse y 3 minutos adicionales cuando lo hagan.
Si bien lo más recomendable es elegir mejillones frescos, en caso de utilizar los congelados, el proceso es exactamente igual. Disfruta de los más ricos mejillones y agrégalos a las recetas que prefieras, como una espectacular lasaña, aunque así solitos con un toque de limón estarán divinos.
Aprovecha todo el sabor que tendrá el caldito resultante y prepara una rica salsa o utilízalo como líquido de cocción de un espectacular arroz.