No es ningún secreto que Lydia Lozano es la colaboradora más llorona de Sálvame. La periodista del corazón es de lágrima fácil, aunque se recompone fácilmente y puede pasar de llorar a moco tendido a marcarse un chuminero en pocos segundos.
Por este motivo, muchos compañeros la atacan mientras discuten y le dicen un sonoro «y ahora ponte a llorar». Los colaboradores le acusan de hacerse la víctima y de poner a la audiencia de su lado con los llantos. A continuación, repasamos los motivos por los que Lydia Lozano ya no es ‘intocable’ en Sálvame.
3«EL MUERTO JUSTO» DE SÁLVAME
Para hacer leña del árbol caído, no se les ocurrió nada mejor que preguntar a Lydia Lozano si algunos famosos estaban muertos o vivos. Emulando al concurso que les había quitado una hora de programa, titularon esta especie de juego como «El muerto justo«, en el que todos los colaboradores, pero especialmente Lydia tenían que decir si el personaje seguía vivo o ya había fallecido.
Esa tarde estaba como presentadora Paz Padilla, que dijo que tiene mucha «guasa» que le tocara presentar a ella esta macabra sección. Y es que a los directores de Sálvame les pareció muy buena idea «jugar» a adivinar si los famosos están muertos o vivos sin pensar que eso podría hacer daño a sus familias y Lydia Lozano se prestó a ello socavando aún más su credibilidad.