Los años pasan y en la televisión española uno de los programas que sigue acaparando la atención es ‘El Chiringuito de Jugones’, que se emite por ‘Mega’. El programa ha calado muy hondo en los espectadores que esperan impacientes a Josep Pedrerol y a todos sus tertulianos no solo para conocer su opinión, análisis o exclusivas del mundo del fútbol, también para ver sus ocurrencias con respecto a toda la actualidad que puede haber. Esas batallas campales entre el lado de los que apoyan al Real Madrid contra los que hacen lo propio con el Barcelona; los momentos de euforia o alegría de cada bando; esos análisis de lo que sucede en Champions League; incluso los momentos divertidos de Cristobal Soria, la euforia desmedida de Tomás Roncero, la pasión de Jota Jordi por el Barça o los análisis bien medidos de Javi Balboa, todo tiene repercusión.
Desde hace mucho que Pedrerol definió la dirección del Chiringuto y poco ha variado desde allí; sin embargo, la idea ha funcionado y todo lo que hacen, incluida esa interacción constante con el público solo ha generado más popularidad para el programa. Lo que si suele cambiar con el paso del tiempo son los tertulianos, algunos están desde hace muchos años, otros han salido y han regresado tiempo después; pero también están los que han dicho adiós y no han vuelto jamás. Uno de los casos más recordados de salidas es el de Cristina Cubero que en pleno programa se peleó con Pedrerol y más nunca volvió; aunque otra salida, también traumática, pero en este caso por el cariño que le tenía el público, fue la de Irene Junquera. A la madrileña le dedicaron un programa especial y así se supo de su marcha para probar otras cosas.
Un gran paso en otra dirección
Lo cierto es que Irene Junquera ha tenido una relación profesional muy estrecha con Josep Pedrerol. Desde que comenzará a trabajar en ‘Punto Radio’, allí el presentador catalán vio algo especial y cuando salió para hacer un programa de televisión en ‘Intereconomía TV’, la periodista madrileña lo acompañó. Allí se dio el comienzo con ‘Punto y Pelota’, que poco después evolucionaría para transformarse en ‘El Chiringuito de Jugones’; en ambos espacio se dedicó a ser «La voz del fanático», quien leía los mensajes que mandaban los aficionados por redes, hasta que su sapiencia deportiva la hizo una tertuliana regular del programa. Si ya era muy querida por el publico al recibir sus mensajes, su popularidad aumentó mucho más al ser tertuliana y demostrar toda su calidad al dar su certera opinión; no obstante, sin que sucediera nada en particular, Irene Junquera decidió dar un paso al costado.
En su despedida explicó que abandonaba el Chiringuito para dedicarse al mundo del entretenimiento, que es su otra gran pasión. «Hay que tomar decisiones en la vida y es una que he tomado. Y ya está. Quiero mantener cierta vinculación con el mundo del deporte, porque me gusta mucho. Pero también es verdad que ahora mismo estoy centrada en el entretenimiento», comentó la periodista. Durante su despedida también comentó que no se sentía como una estrella tras su paso por el programa y que además tendría siempre un gran cariño a lo que significaba ese espacio. «De El Chiringuito me quedo con todo. El espíritu de trabajo, el esfuerzo y no rendirme nunca», indicó antes de recibir el cariño de todos sus compañeros. La despedida fue muy emotiva y en ella explicó que siempre estaría ligada al periodismo deportivo; pero que ahora probaría otro mundo.
Irene Junquera se ha asentado en su nueva área
Para Irene Junquera significó un gran paso pasar de los análisis de fútbol en el Chiringuito, a las tertulias sobre la actualidad en el mundo del entretenimiento; pero lo hizo de gran forma. La madrileña permaneció en ‘Atresmedia’, aunque en este caso para colaborar con el programa ‘Zapeando’, que en ese momento presentaba Frank Blanco; con este también estuvo en ‘Vamos Tarde’, de ‘Europa FM’, y luego en ‘Las Mañanas KISS’. Sin embargo, no se detuvo allí debido a que empezó a participar en el programa de Risto Mejide titulado ‘All you need love… o no’; además también se convirtió en presentadora principal de ‘Safari, a la caza de la televisión’. Y su expansión en el mundo del entretenimiento no paró y poco después se convirtió en una de las concursantes de la séptima edición del programa ‘Gran Hermano VIP’.
Aunque en un primer momento había renegado de ese tipo de programas y expresó que no le gustaba para nada el formato, la periodista madrileña decidió dejar los prejuicios y sus quejas a un lado para participar en el reality show sin ningún tipo de complejos. Si bien estuvo nominada para salir en el primer capítulo, ella logró salvarse; al final, la se convirtió en la séptima expulsada del programa. No cabe duda que siempre existieron rumores de que su salida del mundo deportivo se debió a una pelea con Pedrerol, pero ella lo desmintió categóricamente al decir: «En los matrimonios hay veces que hasta no te hablas con tu pareja. Nosotros hemos tenido ratos de pasar muchas horas al día juntos y casi ni hablarnos, pero siempre que nos hemos sentado a hablar, todo se ha solucionado». Su recuerdo siempre estará presente en el Chiringuito.