El Gobierno no contempla por el momento la evacuación de su Embajada en Kabul ante el inexorable avance de los talibán en su ofensiva contra el Gobierno afgano y, de hecho, está a la espera de que el nuevo jefe de la misión, Ricardo Losa, pueda asumir su puesto en las próximas semanas.
En las últimas horas, un alto cargo estadounidense ha indicado que los talibán podrían tomar Kabul en los próximos 90 días, mientras que la capital afgana podría quedar aislada entre los próximos 30 y 60 días, según ha precisado otro en base a las evaluaciones de Inteligencia.
Por otra parte, el Departamento de Estado ha confirmado este jueves que va a reducir el personal de su Embajada en Kabul en las próximas semanas, según informa la cadena CBS. Por su parte, el pentágono tiene previsto enviar unos 3.000 efectivos para llevar a cabo este proceso, según este mismo medio. Además, Estados Unidos ha vuelto a pedir hoy a sus ciudadanos que abandonen el país.
Así, las fuentes de Exteriores consultadas han señalado que todas las embajadas cuentan con un plan de contingencia y evacuación que se va actualizando en función de los acontecimientos y que podría activarse llegado el caso, algo que por el momento no se contempla.
No obstante, las fuentes han explicado que se sigue con atención la evolución de la situación en Afganistán y que, llegado el caso, dicho Plan de Contingencia podría activarse de forma inmediata para proceder a la evacuación de la Embajada. Asimismo, han asegurado que no descartan ninguna posibilidad y que están preparados para actuar «en función de la situación».
Además, está previsto que el nuevo embajador, al que nombró el Consejo de Ministros el pasado 3 de agosto, llegue a Afganistán en las próximas semanas para ocupar su puesto. Mientras esto ocurre, y para evitar un «vacío», ha resaltado las fuentes, se ha pedido al embajador saliente, Gabriel Ferrán, que permanezca en la Embajada.
Actualmente en la delegación diplomática española –objeto de un ataque de los talibán en diciembre de 2015 en el que murieron diez personas, entre ellos dos policías españoles– se encuentran el embajador, la segunda jefatura y el personal de las fuerzas de seguridad, mientras que el resto son trabajadores locales afganos.
La situación de seguridad en Afganistán es muy fluida. Los talibán se han hecho en unos días con el control de once capitales de provincia, la última de ellas Heart. La ciudad, una de las más importantes del país, acogió precisamente a un contingente español que completó su misión en octubre de 2015.
EXTERIORES RECOMIENDA SALIR DE AFGANISTÁN
En esta clave, el Ministerio de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación ha actualizado sus recomendaciones de viaje para Afganistán, desaconsejando los desplazamientos al país «bajo ninguna circunstancia» y recomendando a los españoles que actualmente estén allí que «lo abandonen a la brevedad posible haciendo uso de los vuelos comerciales actualmente disponibles».
A quienes permanezcan en el país, Exteriores les aconseja mantenerse «alejado de las zonas afectadas, extremar las precauciones y mantenerse informado de la evolución de los acontecimientos, siguiendo los canales de información y las indicaciones de las autoridades locales».
Asimismo, les pide que mantengan contacto frecuente con la Embajada española en Kabul y que comuniquen «desplazamientos y la salida definitiva del país». También les solicita que se inscriban en el Registro de Matrícula Consular de la Embajada y comuniquen su lugar de residencia en Afganistán, datos de contacto y sus cambios.
Desde el departamento que dirige José Manuel Albares se recuerda que «existe un serio riesgo en todo el país de que se produzcan atentados y secuestros». Además, en la situación actual, se incide, pueden producirse «ataques con bombas y ataques suicidas, especialmente en lugares públicos, edificios gubernamentales, sedes de organizaciones internacionales y de ONG y hoteles».