El panorama dentro del Real Madrid se va aclarando más y más conforme los días van pasando y una de las cosas que más se está dejando ver es que el equipo que está conformando Carlo Ancelotti se parece mucho al que él dejó cuando se tuvo que marchar en el 2015. Pese a que tanto el estratega italiano como Florentino Pérez hablaron de que varios cambios se darían en el conjunto merengue para esta temporada, todos estos brillan por su ausencia. Ancelotti explicó al momento de su presentación oficial con el club que quería ver a aquellos hombres que ya no parecían tener el nivel para jugar en el Madrid; es decir, los Marcelo, Isco o Bale, pues si se querían quedar debían ganárselo en el campo. Sin embargo, tanta demostración no le habrá hecho falta; porque sus alineaciones dan a entender el equipo que usará.
Lo cierto es que el italiano no parece aprender de los errores de Zinedine Zindane y su apuesta es clara por esa vieja guardia que él mismo conoce, pues a buena parte de ella la tuvo bajo sus órdenes. Si bien lo de Bale es un poco más asumible, pues prácticamente desde su regreso de la cesión, el entrenador blanco explicó que quería usarlo; pero si que extraña que haga lo mismo con hombres como Marcelo o Isco que parecían ya haber dicho su última palabra con el Real Madrid. La cuestión es que no solo es que los utilice a ellos y otros cuantos más, lo malo es que está desaprovechando talento joven y más que certificado. Uno de los que parece quedar en el aire con Ancelotti no es otro que Martin Odegaard y eso no le gustaría nada al jugador.
Esa falta de minutos lo deja en el limbo
Si bien es cierto que en el apartado de fichajes el Real Madrid está casi paralizado, pues solo la llegada de David Alaba entra en ese caso; lo cierto es que hay varios jugadores que regresan de sus cesiones y algunos de ellos con muchas posibilidades de quedarse y obtener minutos. El de Bale es el caso más resaltante, pero se pensaba que uno de los que contaría mucho más sería Odegaard; esto debido a que el noruego cuenta con la confianza plena del club de que se convertirá en uno de los hombres importantes y más aún tras la salida de un Zidane que lo decepcionó por completo al sacarlo de su préstamo de la Real Sociedad y tenerlo media temporada en el banquillo sin saber las razones. Con Ancelotti se suponía que sería una historia distinta y tal como indica ‘As’, esto no sería tan así.
Para el italiano, Odegaard no sería del todo confiable y es por eso que, tal como se vio ante el AC Milan, este solo disputó los últimos 30 minutos del juego. Cuando todos los cambios saltaron al empezar la segunda mitad e incluso canteranos como Miguel Gutiérrez y Antonio Blanco ya estaban en el terreno de juego; Ancelotti no le dio minutos al noruego hasta que faltaba media hora. El contraste más grande pude verse con Isco, que en las preferencias del italiano ya lo habría adelantado y apunta como titular en este inicio de Liga, debido a que este disputó casi todo el partido y su buen nivel hace pensar que el estratega del Real Madrid lo elegirá por encima de un Odegaard que en sus minutos no ofreció casi nada; eso es algo que lo tendría muy preocupado y lo pone a dudar si debería quedarse.
Odegaard quiere triunfar de blanco
Aunque la llegada de Ancelotti en un primer momento lo entusiasmó, pues sería dejar atrás el mal trago con Zidane; ahora está viendo que la cosa no parece que cambiará en nada. El sistema que seguirá utilizando el equipo parece que será el 4-3-3 y al jugar sin mediapunta le quita la mayor y la mejor área donde desempeñarse; eso combinado a que a pesar de hacer la pretemporada completa a sus órdenes, pues Noruega no estuvo en la Eurocopa ni en los Juegos Olímpicos, no ha entrado en los planes del técnico como otros que si estuvieron presentes en esos torneos. El desánimo parece extenderse en un jugador que ya se vio tanto en la Real Sociedad como en el Arsenal que necesita confianza para rendir al máximo nivel. De hecho, en la Premier League no lo olvidan y podrían aprovecharse de este mal momento para tentarlo.
La verdad es que Odegaard no quiere marcharse del Real Madrid, pues su ilusión es triunfar del blanco. Eso es lo que sueña desde que con 16 años aterrizó en el club merengue y cuya meta es asentarse en el primer equipo; sin embargo, Zidane primero y ahora Ancelotti parecen empujarlo fuera, pues no le ofrecen la cantidad de minutos que él desearía tener y, más importante aún, otros clubes si le ofrecen. Arteta está desesperado por volver a contar con él; aunque esta vez de forma definitiva y no como cesión, pero como en el Madrid están seguros de que será una pieza vital en el futuro no quieren escuchar nada de una salida. La lesión de Kroos obliga a que deba quedarse; por lo que tiene que trabajar para rendir en cualquier posición del mediocampo y demostrar que su futuro es merengue y nada más.