El exdirector de Sistemas de Salud de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y exconsejero de Sanidad del Gobierno Vasco, Rafael Bengoa, ha considerado que las medidas de protección para el próximo curso escolar deberán ser «mayores» que en el anterior, por la variante Delta de la covid-19.
En una entrevista en Radio Vitoria, Bengoa ha analizado la pandemia del coronavirus y la posibilidad de inocular próximamente una tercera dosis de la vacuna.
A su juicio, se pueden tener «suficientes vacunas» como para asegurar que se vacune al 10% de personas vulnerables de países en desarrollo, tal y como aconseja la OMS, y vacunar a la vez en Europa con una tercera dosis a los más vulnerables.
«Pienso que es compatible y no hay que contraponer ambas cosas, aunque es verdad que no habría bastantes vacunas si se vacunase a toda la población, tal y como dice Israel», ha expresado.
Por otro lado, ha reconocido que existen estudios que determinan que la pérdida de anticuerpos se produce más en las «personas mayores, al tener el sistema inmunitario más débil» y, por ello, la tercera dosis deberá ser destinada a «los mayores de 75 años».
«Con la variante anterior del virus, el 70% de la población vacunada quizá hubiera sido , pero la Delta nos hace subir el listón de la inmunidad de grupo a casi el 90%», ha expresado, para añadir que se deberá seguir vacunando a los jóvenes y «quizá sea necesario vacunar a los niños».
A su juicio, con el regreso a las aulas de los más pequeños se tendrá que seguir en septiembre creando burbujas, usando mascarillas, sistemas de ventilación y «quizá medidores de CO2».
En este sentido, ha apostado por incrementar las medidas de protección por el hecho de que el curso educativo arrancará este año bajo la amenaza de la variante Delta.
«Las burbujas y protecciones de este año tienen que ser mayores. Es muy importante que, ahora que se prepara la vuelta al colegio, saber que las mascarillas o los medidores de CO2 suponen una inversión para asegurar que la vuelta al colegio sea segura», ha indicado, para añadir que el 4-5% de los niños sufren un covid persistente durante semanas.
OBLIGAR A VACUNAR
Por último, y ante la posibilidad de obligar a vacunar a sanitarios o profesionales que trabajan con personas mayores, Bengoa ha sostenido que en aquellos países donde se da una gran resistencia a las vacunas, como en los casos de EEUU, Francia o Alemania, esto se acabará «regulando».
Sin embargo, ha defendido que en el caso del Estado español se debiera optar por «intentar convencer a los trabajadores más que obligar», al haber una menor «resistencia a las vacunas».
Tras recordar que la variante Delta es «más transmisible y provoca una carga viral más alta», ha advertido que, por ello, la situación es «diferente al año pasado».
«La necesidad de controlar a quienes cuidan personas vulnerables va a ser importante. La variante Delta descontrolada en una residencia va a crear muchos problemas. Las personas mayores están vacunadas, pero puede que no haya funcionado del todo, por lo que hay que asegurar que todos los trabajadores estén controlados», ha argumentado.