Por lo general, cuando compramos helados suele pensarse que los de agua o frutales, a los que llamamos polos son puro hielo, y por lo tanto no benefician, es decir, el helado de agua o el sorbete, es de lo peor que el resto porque según no alimentan ni aporta nada.
Por ello, habitualmente se prefieran los de leche o cremosos para los niños, pues la combinación de leche, crema o nata, con otros ingredientes como chocolate, galletas o incluso frutas es más sano ¿Pero esto será cierto? Conócelo a continuación.
4Desde Alejandro Magno
Se dice que el rey de Macedonia, Alejandro Magno, y el emperador romano Nerón consumían sus jugos de frutas y sus vinos con hielo o nieve de las montañas, que eran traídos por sus esclavos. En la Edad Media, en las cortes árabes se hacían productos con frutas y especias enfriados con hielo de las montañas.
Emperador Tang (618-697, antes de la era cristiana) de la Dinastía Shang, en China mezclaba hielo con leche, de allí pasó a la India, Persia, Grecia y Roma, y de allí al resto del mundo.