Truchas al jerez: El truco para freírlas y que queden en su punto

Que delicia el rico aroma de las truchas fritas; este pescado es toda una delicia, y tan solo al comenzar a freírlas, tienen la capacidad de hacer agua la boca. Si de por sí frutas son muy ricas, combinadas con el jerez resultan un plato estrella y toda una tentación.

La calidad y sabor de la carne de las truchas es tan refinado y delicioso, que muchos la consideran como la perdiz de agua dulce. De allí que sean disfrutadas en los más exquisitos platos.

Para disfrutar al máximo del sabor y cualidades nutricionales de las truchas, tal como sucede con otros pescados, la frescura es un factor determinante. ¿Cómo saber cuando la trucha está fresca? Existen diferentes maneras de notar cuando el pescado está en el mejor estado para el consumo humano. 

Determinando la frescura de las truchas

Truchas

Más allá de indicar si ha sido recientemente capturada, la frescura de las truchas indica también  si se mantuvo tuvo una buena cadena de frío hasta su consumo. Tal como sucede con otros pescados, estas pueden durar un tiempo entre su captura y llegar a tu mesa; sin embargo, el respeto a la cadena de frío de manera correcta, la hará completamente segura a la hora de disfrutarla.

Si bien con las técnicas actuales de piscicultura, es posible comer truchas en cualquier época del año, es igualmente necesario observar de cerca su frescura.

A la hora de comprar las truchas, hay varios factores que debes tener en cuenta:

  • La piel de las truchas debe ser brillante, las escamas intactas y la piel adherida a la carne. Una prueba que puedes hacer es tocarla con la yema de tus dedos. Al hacerlo, la carne debe volver a su forma original y nunca quedar hundida.
  • No debe desprender ningún tipo de olor desagradable, esto sería un indicativo de que está en mal estado. 
  • Los ojos deben estar brillantes y abultados, no hundidos o secos. Así mismo, las branquias deben estar rosadas y húmedas. No deben estar de otro color o mostrarse secas. 

Lleva a cabo estos sencillos consejos a la hora de la compra, y disminuirás los riesgos.

Una vez en casa, las truchas no deben estar por mucho tiempo dentro de tu nevera. Como máximo, lo recomendado es comprarlas hasta dos días antes de su preparación. Incluso lo más idóneo sería comprarlas el mismo día que las vas a preparar, para garantizar así su frescura. 

El truco para freír las truchas y tener un plato perfecto

Truchas Al Jerez: El Truco Para Freírlas Y Que Queden En Su Punto

El jerez potencia de manera maravillosa el sabor de las truchas, integrándose a ellas con delicadeza y realzando todo su sabor. Ahora bien, para cocinar este pescado, el mismo debe freírse llevando a cabo un truco que dejará su deliciosa carne en su punto.

Un factor determinante en el resultado final de este plato, es freír la trucha de manera correcta. Si se pasa de cocción, la carne de este pescado queda desagradablemente seca. Así que para freírla, el truco es hacerlo por un tiempo máximo de 6 minutos; así mismo, l aceite debe encontrarse lo suficientemente caliente.

Para preparar el plato de truchas al jerez para cuatro personas, comienza lavando muy bien 4 truchas y procede a salpimentarlas. Cuida de no excederte con la cantidad de sal. En una sartén añade aceite de oliva virgen extra y caliéntala lo suficiente. Pasa las truchas por harina y llévalas a freír en el aceite bien caliente.

Cuando coloques las truchas, baja el fuego a medio y déjalas freír por 5 a 6 minutos. Con el primer golpe de calor, se formará una costra que protegerá su interior dejándolo jugoso, mientras que su exterior quedará crujiente y dorado. Una vez que estén doradas, retíralas de la sartén y colócalas sobre un plato con papel absorbente.

La salsa de jerez, el toque exquisito de este plato 

Salsa

La salsa de jerez terminará de aportarle a las truchas el fino y delicado sabor y aroma que las convierten en un plato realmente exquisito; y para prepararla, será un procedimiento realmente sencillo.

Coloca en una sartén un poco de aceite de oliva hasta que esté caliente. Añade 2 dientes de ajo pelados y cortados finamente. Una vez que los ajos se estén comenzando a sofreír, agrega 150 gramos de panceta cortada en trozos pequeños y 100 gramos de almendras fileteadas.

Sofríe todo por un tiempo aproximado de 4 minutos, removiendo constantemente para que la panceta se torne dorada y para que las almendras se tuesten bien. Vierte 1 taza y ½ de jerez, el zumo de un limón y 1 cucharadita de pimentón dulce.

El último truco para que este plato quede excepcional, es dejar que la salsa se reduzca un poco, quedando ligeramente espesa. En ese punto, sumerge las truchas en la salsa y permite su cocción por 5 minutos más. 

Sirve con una fresca ensalada o un sencillo arroz blanco que puedes hacer perfecto en el microondas.

Complementando este plato con una fresca guarnición, puedes garantizar el consumo de un alimento sumamente completo. Las truchas son ricas en Omega 3, por lo que el consumo de este pescado, fortalece los huesos y previene el desarrollo de la osteoporosis. Así mismo, es magnífica para mejorar el sistema nervioso, la piel y el cabello.