El número de empleados en el sector industrial en el segundo trimestre del año se situó en los 2,66 millones de personas, lo que supone un incremento del 0,9% con respecto al trimestre previo, tras sumar 22.900 personas a la ocupación en el sector, según los resultados de la Encuesta de Población Activa publicada este jueves.
No obstante la variación ha sido distinta según el género, puesto que crece más entre los hombres, que aumentaron su número en 25.700 (un crecimiento trimestral del 1,3%) en tanto que en el caso de las mujeres la reducción del empleo ha sido del 0,4%, al salir del empleo 2.800.
Con esta variación, el empleo masculino industria queda en 1,967 millones, mientras que el femenino se redujo hasta las 698.100 mujeres en este trimestre, siendo el segundo consecutivo que reduce empleo femenino, quedando el número de ocupadas lejos de las 758.300 que se contaban antes de la pandemia.
Al mismo tiempo, el número de mujeres temporales en el sector se sigue reduciendo a un ritmo del 4,7% en los últimos tres meses, mientras que el de los hombres crece un 5,9%. En total, son 298.500 hombres temporales y 121.600 mujeres, lo que sigue dando una tasa de feminización de este empleo precario superior a la que se puede observar en el empleo industrial total.
Los datos también demuestran la segmentación en virtud de la edad y la aplicación de la variabilidad sobre la población joven, ya que el número de personas jóvenes que trabajan en el sector se ha incrementado en casi un 7% en los últimos tres meses, cuando en el trimestre anterior se redujo en un 9,5%.
Por su parte, el desempleo industrial se ha reducido en 43.300 personas en este trimestre (-22,2%), alcanzando las 151.400 personas; 97.500 hombres y 53.000 mujeres, con lo que la tasa de feminización del desempleo es del 35,6%.
Con estos datos, CCOO de Industria considera «apremiante y prioritario» utilizar la financiación europea y los próximos Presupuestos Generales del Estado en la consecución de una transformación justa y sostenible de la industria.
Comisiones Obreras sigue reclamando un Plan Estratégico Industrial acordado por todos los agentes del sector como eje esencial para afrontar los cambios que garanticen un sector industrial inclusivo, que fije como objetivo estratégico prioritario la inserción de alta calidad en el sistema productivo global.
