Además de ser uno de los alimentos más populares de todo el mundo, también es uno de los más consumidos, ya que seas del país que sea, siempre hay un tipo de queso que se come sin parar dependiendo de dónde te encuentres. Pero qué pasa con la corteza.
Con cada tipo de forma diferente que tienen los quesos, podemos ver que cada forma tiene un porqué, y eso es para que lo disfrutemos más aún. Aunque a menudo las personas tienen unas preguntas muy recurrentes sobre el queso, sobre todo al momento de distinguir un queso artesanal de uno industrial.
6Cortezas naturales
Estas cortezas de origen natural son aquellas que se producen gracias al mismo queso, mientras este se encuentra pasando por su período de maduración, así que el queso se va recubriendo de los ingredientes naturales.
A menudo las cortezas que son creadas por el mismo queso son bastante ricas en mohos y bacterias, debido a que el queso es un producto que tiene una fermentación natural, así que en su mayoría, estas cortezas naturales pueden ser ingeridas sin ningún tipo de problema.
Como por ejemplo, tenemos al queso brie, camembert o los rulos de cabra. Estas cortezas de origen natural son de un color blanco, que al tacto se siente aterciopelado y es comestible.
Otras cortezas que también son naturales y pueden ser ingeridas sin ningún tipo de miedo, son la corteza del queso azul. A pesar de que en la corteza haya moho, esto no es ningún problema, de igual modo puede comerse.
Las cortezas que se ven en los tipos de quesos que son artesanos tienen una especie de curación como los quesos curados que son de cabra. Estos quesos suelen estar casi siempre compuestos de lo que es la propia parte externa del queso, la cual es más dura y llega a ser también de distintos ingredientes, los cuales dependerán y varían según la variedad y su productor.
Estas cortezas naturales son a menudo recubiertas con aceite de oliva, hierbas, especias y hasta llegan a ahumarse.
También existen las cortezas que son comestibles por completo, estas cortezas se tratan con salmueras y vinos. Todas estas cortezas pueden ser consumidas, pero dependerá también de los gustos de cada persona y si prefiere el queso con corteza o sin ella.
