La fecundación in vitro es el proceso real de inseminación artificial. Se ha desarrollado y perfeccionado continuamente desde el primer bebé probeta en 1978. La FIV se usa para tratar a mujeres con trompas de Falopio bloqueadas irreparablemente, endometriosis o trastornos de la fertilidad masculina.
¿QUÉ ES LA FECUNDACIÓN IN VITRO?
La fecundación in vitro (FIV) es una forma de fertilización asistida. En este procedimiento, el óvulo y los espermatozoides no se fusionan dentro del cuerpo femenino, sino en un tubo de ensayo en el laboratorio. Es por eso que este método se conoce como «in vitro», que simplemente significa «en vidrio».
En este procedimiento, después de una estimulación previa, extraemos los óvulos de la mujer, que combinamos con el esperma de la pareja fuera del cuerpo. Por tanto, la fecundación tiene lugar fuera del cuerpo («extracorpóreo») de la mujer («in vitro» = latín para «en el vaso»).
Dos o tres días después de la fertilización, transferimos los embriones a la cavidad uterina (transferencia de embriones).
Los óvulos y los espermatozoides se almacenan en el laboratorio de reproducción durante un máximo de 48 horas. Para esto, se crean condiciones de vida que se corresponden lo más cerca posible a las de la trompa de Falopio de la mujer. La temperatura ambiente, la humedad y la composición del aire en la incubadora deben adaptarse a las del cuerpo humano.
PROCESO DE LA FECUNDACIÓN IN VITRO
1er paso: promover la maduración del óvulo (estimulación ovárica)
En principio, por supuesto, la FIV se puede llevar a cabo en un ciclo espontáneo. Sin embargo, la estimulación hormonal tiene sentido. En un ciclo natural, es decir, no estimulado, normalmente solo madura un óvulo.
Esto también significa una probabilidad relativamente baja de transferencia de embriones y embarazo. Al estimular, aumentamos las posibilidades. Estimulamos el crecimiento de varios folículos con el objetivo de obtener varios óvulos.
Después de las investigaciones preliminares necesarias, comenzará la estimulación hormonal de los ovarios. La estimulación se realiza mediante inyecciones diarias de hormonas.
Comienza en un momento definido con precisión y planificado previamente. El primer control ecográfico se realiza a los 5 días, durante los cuales se realiza una inyección diaria.
Riesgos:
Las reacciones alérgicas a las hormonas son muy raras. En el 1-2% hay una reacción exagerada de los ovarios (síndrome de hiperestimulación). Gracias a los controles regulares, esto se puede reconocer a tiempo. Rara vez es necesaria la hospitalización o la interrupción de la estimulación para el tratamiento.
Paso 2: control de la maduración del huevo
Comprobamos los folículos en crecimiento durante el tratamiento de estimulación mediante ecografía. Al mismo tiempo, medimos la hormona estradiol. De esta manera, determinamos el mejor momento para obtener óvulos maduros y fértiles.
3er paso: desencadenar la ovulación
Con un tamaño de folículo de 16-20 mm y los niveles hormonales correspondientes, activamos la ovulación con una inyección de HCG. 34 a 36 horas después, extraemos estos óvulos del folículo (punción folicular).
4to paso: extracción de óvulos (punción del folículo)
El procedimiento es ambulatorio. Bajo anestesia local y con un analgésico, los folículos se pueden succionar por ultrasonidos con una aguja fina en unos minutos. Un equipo de anestesia supervisa el procedimiento. Si es necesario, también se puede realizar una anestesia corta.
5to paso: recolección y preparación del semen
El día de la recolección de óvulos, necesitamos una muestra de esperma de la pareja. Los espermatozoides móviles se concentran mediante métodos de procesamiento especiales.
6to paso: fertilización de los óvulos obtenidos y crecimiento de los embriones
El semen y los óvulos con su complejo de cúmulos se juntan en un tubo. A la mañana siguiente, se comprueba el éxito de la fecundación in vitro sobre la base de los pronúcleos; esto actúa en aproximadamente el 60% de los óvulos.
Sin embargo, pueden ocurrir grandes fluctuaciones individuales. Es raro que no se produzca la fertilización, por lo que no se puede realizar ninguna transferencia.
7mo paso: transferencia de embriones
Dos o tres días después de la recolección de óvulos, los embriones se transfieren al útero. El número depende de la edad del paciente, el estadio y la calidad de los embriones y la legislación (un máximo de tres cigotos pueden convertirse en embriones).
El objetivo es lograr la mayor tasa de embarazo posible evitando trillizos. La transferencia se realiza en el laboratorio con la vejiga urinaria llena. La correcta colocación se comprueba con la ecografía sobre la pared abdominal.
Después del traslado, el paciente debe permanecer en cama durante media hora antes de irse a casa. La fase del cuerpo lúteo debe continuar con el apoyo de la medicación. Recibirá supositorios vaginales que contienen la hormona progesterona. La hormona del embarazo se determina en la sangre catorce días después de la transferencia.
CRIOPRESERVACIÓN
Si hay más huevos fertilizados (cigotos) de los necesarios, se pueden congelar (criopreservar). Si no ha ocurrido un embarazo o si se desea otro embarazo, estos se pueden descongelar para la transferencia.
De este modo, se puede prescindir de la estimulación renovada, la punción y la fecundación in vitro. Aproximadamente el 60% de los óvulos fecundados congelados (cigotos) sobreviven a la descongelación. Los cigotos se conservan durante un máximo de cinco años.