Conducir utilizando el teléfono móvil, auriculares, navegadores o dispositivos similares que disminuyen la atención sobre la carretera o llevar el coche con el calzado inadecuado son algunos de los motivos más frecuentes por lo que los españoles son multados en verano.
Así, según apunta el comparador de seguros Acierto.com, conducir con chanclas, descalzo o con calzado abierto es una práctica que puede entorpecer el uso de los pedales y mermar la capacidad de reacción. Sin embargo, esta conducta no está explícitamente recogida como una infracción en el Reglamento General de Circulación.
Por su parte, utilizar el teléfono móvil u otros dispositivos que reduzcan la atención sí se recoge como una infracción grave, sancionada con 200 euros de multa y tres puntos de carné.
Circular sin camiseta también es habitual en estos meses de calor. Un comportamiento que incrementa el riesgo de sufrir quemaduras durante un frenazo por el cinturón de seguridad, lo que aumenta en general la gravedad de casi cualquier lesión al volante. Esto puede acarrear una multa de 80 euros.
Este mismo importe supone ser ‘cazado’ con el codo apoyado en la ventanilla, ya que dicha posición puede afectar a la libertad de movimientos del conductor.
Comer y beber al volante es otra sanción recurrente que llega a los 200 euros y a la pérdida de dos puntos de carné de conducir. Tirar colillas por la ventana también compromete la seguridad de otros usuarios y puede provocar incendios, por lo que está sancionado con 200 euros de multa y cuatro puntos.
Llevar el equipaje mal organizado puede ser motivo de sanción, con hasta 500 euros y cuatro puntos. Sin embargo, más del 20% de los viajeros llevan equipaje dentro del habitáculo, mientras que el 5% usa una baca y el 2% un remolque.
«No obstante, las maletas pueden convertirse en un auténtico peligro en caso de accidente. Podrían salir disparadas hacia delante con su peso multiplicado por la inercia del coche», ha subrayado Acierto.com.
La firma ha explicado que la Dirección General de Tráfico pone más de 10.000 multas al día. Además, dos de cada tres sanciones en vías interurbanas están directamente relacionadas con el exceso de velocidad. Circular sin la ITV pasada, tras haber consumido alcohol o sin utilizar el cinturón de seguridad adecuadamente son otras de las más habituales.
