Las compañías que sufren ciberataques, en gran medida por los ransomware, tienen el gran dilema de pagar o no por el rescate. Entre los principales ataques se encuentra la información secuestrada, archivos encriptados, sistemas caídos, etc. Y junto a esto un mensaje que llega directamente a los ordenadores que se conoce como ciberextorsión: hemos atacado a tu organización, aquí tienes una dirección de contacto para negociar el rescate.
Ante esta situación, hay que afrontar que hacer, pero aquí también tienen un papel fundamental las aseguradoras que deben de tener claro que sus asegurados deben luchar contra un ransomware. Y ante esta situación entra en juego el momento de activar las coberturas de ciberriesgos y aparezcan forenses tecnológicos, abogados, peritos, etc.
3Los rescates a estos ciberataques
Cuando la víctima se da cuenta o conoce que le han ciberatacado y todas sus redes están en peligro, es cuando los atacantes envían un mensaje donde indican el pago para proceder al rescate, generalmente en bitcoin.
Y es que muchos de los atacantes también usan la doble extorsión, ya que además de cifrar las redes de los dispositivos, también roban información privada para utilizarla como objeto de distorsión e incluso llegar a hacerla pública si no pagan.