La lucha contra la Covid continua. La vacuna es el único mecanismo de protección para no darle juego a la enfermedad de la COVID-19. Y es que, se ha convertido en el enemigo silente más peligroso que hemos tenido que enfrentar en toda la historia de la humanidad. No lo vemos, pero nos susurra diariamente al oído, y se ha tornando desafiante para todos. Aunque todavía queda un largo camino para lograr la inmunización colectiva, los esfuerzos del Ministerio de Sanidad, y de las mismas comunidades autónomas permanecen a la vanguardia.
Sin embargo, todavía existen dudas sobre las vacunas, su efectividad, si de verdad la gente queda inmune o cómo se aumenta la inmunidad a través del estilo de vida. A ciencia cierta, los expertos están analizando este escollo. Pero, lo que sí queda claro es que vacunarse es la mejor opción, y ponerse la segunda dosis es fundamental. Descubre por qué no debes retrasarla ni dejártela de poner cuando te toque.
3No hay que confiarse
Cada cuerpo es distinto. A pesar de que cada una de las vacunas aprobadas en España tienen su efectividad, siempre hay que seguir los dictámenes de las autoridades de salud para que te pongas la segunda dosis. Y es que, como los estudios que se han hecho sobre las consecuencias de no completar la inmunización han tenido sus conjeturas, lo mejor es no confiarse.
Porque, si algo ha demostrado la Covid es su característica desequilibrante, y eso ha costado muchísimas vidas en el país. De hecho, entendiendo que no todos tienen la misma respuesta cuando le pinchan el brazo, se hace indispensable continuar con la otra inyección que te corresponda según tu edad o grupo social.