Suena el despertador y saltas de la cama, seguramente lo primero que haces es montar a calentar el agua para colar tu café o encender la cafetera automática, pero, ¿has pensado en hacer el café helado? Seguramente te parecerá una locura lo que te pregunto, pero, a ver: seguramente te ha pasado que te duchas te vistes y en lo que pruebas el café que dejaste colando ¡horror!, te parece muy fuerte, muy ácido y no lo disfrutas como desearías.
Esto suele suceder más de lo que nos gustaría (de hecho a mí continuamente me pasa), sin embargo existe una manera más rica de preparar café que me gusta mucho más que el método tradicional y que además tiene muchos beneficios adicionales. Te voy a contar de qué se trata y cómo hacerlo, pero primero quiero que conozcas las ventajas de preparar el café helado.
Café helado: ¿En realidad es mejor que el caliente?
Preparar café helado con este método en infusión te brindará como resultado un sabor más rico y agradable. Lo mejor de todo es que no necesitas ningún artefacto adicional a los que ya tienes y de hecho no necesitas ni cafetera. Te voy a presentar todos los beneficios que tendrás al prepararlo y al consumirlo.
Disfrutas más el sabor
Al ser preparado en frío, el café helado conserva mucho mejor los sabores, pues en el proceso de su elaboración ningún elemento se quema debido a altas temperaturas y además los toques dulzones son extraídos con delicadez de las partes ácidas más saborizadas.
Al ser menos amargo, cuando combinas el café helado con otros sabores como la vainilla o la miel, el resultado será una verdadera explosión de sabores en el paladar que de seguro te encantará.
Más saludable e hidratante
Al dejar de lado el calor para su producción, el resultado es menos amargo, esto lo agradecerá tu estómago y cavidad oral en general. Así mismo, todos los nutrientes presentes en el grano de café permanecen intactos, por ello es realmente saludable.
Si decides consumir el café bien helado, será realmente refrescante, así mismo durante los días más calurosos te dotará de la energía que tanto necesitas.
Consúmelo mientras realizas actividad física
Te ayudará a quemar calorías y mejorará tu rendimiento físico. El café libera ácidos grasos que mejoran tu rendimiento, por esta razón tomarlo antes de realizar actividad física será muy beneficioso para ti.
Te mantiene de buen humor
La dosis necesaria de energía acompañada del agradable sabor del café helado, te mantiene con una actitud positiva, llena de vitalidad y alejada de la depresión.
Café helado, está es la forma de prepararlo y créeme sabrá mejor que el caliente
Preparar el café helado dejará en tu boca un sabor mucho más agradable que el preparado caliente de forma tradicional. Despídete de ese gusto amargo sobre tu lengua y disfruta del placer de obtener un café delicioso con el método menos utilizado, pero que garantiza un sabor mucho más delicioso.
El preparado en frío será todo un deleite para tus sentidos, menos amargo y más refrescante que el que preparamos tradicionalmente. Tienes que probarlo.
Necesitas
- ½ taza de café en grano o recién molido
- 4 tazas de agua fría
- Colador muy fino
- Tela de algodón
- Jarra de cristal
- Azúcar
Preparación
1.- Comienza por triturar los granos de café. Los granos no deben quedar muy molidos, sino más bien conservar una textura parecida a la sal kosher. No es recomendable que utilices el que normalmente usas, pues se extraería excesivamente su esencia y la infusión resultaría amarga.
2.- En la jarra añade las cuatro tazas de agua fría con la ½ taza de café triturado. Si deseas una infusión más fuerte puedes añadir un poco más de café. Revuelve el agua con el café con la ayuda de una cuchara.
3.- Guarda la mezcla en la nevera por un tiempo mínimo de 12 horas para que se haga la infusión.
4.- Filtra en un colador fino cubierto con la tela de algodón todo el contenido de la jarra para evitar cualquier resto o partícula.
5.- Este café es muy concentrado; antes de consumirlo añade agua o leche fría hasta diluirlo a tu gusto. Añade un poco de vainilla si así lo deseas y estarás disfrutando del mejor café del mundo.
Puedes guardar en el refrigerador la infusión al frío hasta por una semana. Eso sí, si ya lo diluiste con más agua o leche, es mejor consumirlo de inmediato antes de que se puedan degradar su calidad.
Si bien el café helado que se obtiene de este método de infusión puedes disfrutarlo así, en frío, de igual forma si deseas consumirlo caliente eres libre de hacerlo, solo diluye la cantidad que vayas a consumir, caliéntala un poco, endulza a tu gusto y disfruta de un café más dulce, menos amargo y más beneficioso para tu salud.
Consejos para disfrutar
Si bien puedes disfrutar del café helado con leche, también puedes añadir toques de sabor más explosivos para tu paladar.
- Añade vainilla y tendrás un resultado alucinante envuelto en un dulce y delicado aroma.
- Imagina el sabor combinándolo con leche condensada, evaporada o con crema batida y un toque de dulce de leche casero.
- Si lo sirves muy frío, puedes aumentar la apuesta refrescante añadiendo unas hojas de menta; y por qué no, unas gotas de un dulce licor de almendras puede dar un resultado simplemente fascinante.
- No te pierdas esta rica opción de hacerlo como lo recomienda nespresso y disfrutarlo con una nube de algodón dulce.
Aunque te pueda parecer que tienes que esperar mucho tiempo para disfrutarlo, créeme… vale la pena. No saques el café helado de la nevera antes de haber transcurrido como mínimo 12 horas, el resultado te hablará por sí solo.
¡A disfrutar!