Villarejo pide al juez que le devuelva su diario personal

El comisario jubilado José Manuel Villarejo ha pedido al juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón que le devuelva «el original» de su diario personal o una copia digital del mismo asegurando que en el cuaderno se incluiría un segundo teléfono de contacto del expresidente del Gobierno Mariano Rajoy.

En un escrito, la defensa de Villarejo ha explicado que este diario resulta «imprescindible no sólo para su propia defensa sino también para poder colaborar y seguir aportando todos los datos precisos» para la investigación.

En esta línea su abogado, Antonio José Cabrera, ha asegurado que «procede la devolución del original» en tanto que el diario es «íntimo y personal», constituyendo «un reflejo escrito de su memoria», por lo que «no pueden constituir ni el objeto ni el instrumento del delito investigado».

Asimismo, el letrado ha señalado que no «cabe una utilización selectiva de este diario». «Lo que me interesa lo incluyo y lo que no lo expurgo», ha denunciado la defensa, que ha sostenido que un documento de esa índole es una «plasmación escrita de su capacidad cerebral» y su «memoria».

SU DIARIO NO PUEDE SERLE «EXTIRPADO A MODO DE LOBOTOMÍA»

«Por ello, al igual que su cerebro, su diario personal no puede serle extirpado a modo de una lobotomía para que no pueda recordar y con ello poder defenderse y, a la vez, seguir colaborando con la administración de justicia para el completo esclarecimiento de los hechos investigados», ha incidido la defensa del comisario jubilado.

De esta forma, y después de que sus diarios hayan «sido admitidos por el instructor como una fuente de prueba» por su «interés» para la acusación, la defensa de Villarejo exige «poder contar» con ellos para estar «en igualdad de armas».

En definitiva, la representación considera que «no es admisible que se le pongan al investigado obstáculos irrazonables e injustificados para su acceso» a los diarios, haciendo que el comisario tenga que personarse en los juzgados para revisarlos, «necesitando para ello muchos días».

«Son sus propios diarios personales y en ellos es sólo su intimidad la que puede verse afectada, pues sus recuerdos sobre otros no pertenecen más que a él mismo y no a ninguna otra persona y, por supuesto, tampoco al Estado», ha zanjado su abogado.

Este mismo martes, el propio Villarejo también se quejó ante los medios de comunicación por tener que acudir a sede judicial para consultar sus agendas, al tiempo que pidió públicamente al magistrado instructor, Manuel García-Castellón, que le facilite una copia para poder acceder al contenido de sus propios apuntes.

«¿Por qué no me dan copia? Porque tengo anotaciones muy interesantes allí. No estamos en Namibia, estamos en España y esto debe ser un Estado garantista», defendió a su salida del Juzgado Central de Instrucción número 6.

Además, tras ser preguntado por los móviles que según dijo utilizaba para comunicarse con Rajoy, Villarejo aseguró que entregó a la causa el número telefónico personal que tenía para «contactar» con el entonces líder del PP. «Ya solamente lo que tiene que hacer es comprobar esos mensajes», dijo este martes.