Rocío Flores es una de las colaboradoras de televisión más polémicas del acontecer nacional. No es algo que sorprende a nadie, porque ya sabemos de qué clan viene. Y es justamente el que ha puesto a arder los principales platós de Telecinco. El documental de Rocío Carrasco ha abierto la caja de Pandora. Manchó todo el trabajo de Antonio David Flores y lo dejó en la calle, ante los abusos que éste le había perpetrado a la madrileña durante su matrimonio. Asimismo, la batalla campal que se vino después con la custodia de los chicos y cómo el tertuliano los puso en contra de su madre.
Entre dimes y diretes se ha mantenido este fragmentado núcleo familiar, aunque cada quien ha seguido con su vida. Rociíto se ha ganado su lugar en el reconocido grupo de medios, pero ya decía Ana Rosa Quintana en su programa, este chica es muy inocente. Le hace falta conocer más de la tele. Ahora, se ha lanzado su propia soga al cuello y le puede valer una gran patada para que se vaya de una vez por todas de la cadena.
4Rocío Flores saca a flote un tema delicado con la comida
Rocío Flores conoce Supervivientes. Ella vivió de cerca las incidencias de esta isla por demás inquietante. Pero, poco a poco se va descubriendo el lado oscuro de este programa. Si Alberto Álvarez, finalista del año 2019, alegó que este concurso vende mentiras y no es tan fuerte como dicen… Que Rociíto haya dicho que la producción les da alimentos a los participantes, no es algo que deba sorprender tanto.
Sin embargo, la realidad es que, una cosa es que hablen los que no trabajan en el canal y otra distinta es que lo refiera alguien tan afín a la cadena. Flores, aludió que a ellos les dan de comer una vez cambian las locaciones. Menudo error, mejor se hubiese quedada callada. Desde que Isabel Panoja dijo que les daban sándwich y antes que eso, ya conocíamos que esta gente no pasaba tanta hambre como expresaban en cámaras.