La temporada del Atlético de Madrid comandado por Diego Simeone ha finalizado de la mejor forma posible; porque si bien muy pocos creían en las posibilidades del conjunto colchonero, este cerró una campaña magnífica y acabó por obtener el título de LaLiga Sanatander. Claro que varios factores influyeron para lograr semejante triunfo, como el hecho de un inició demoledor, que le permitió al equipo tener un colchón de puntos importantes; la casta suficiente para mantenerse firme cuando llegaron varios resultados negativos muy seguidos; un entrenador que no se amilanó ante todas las críticas que recibió, pues la culpa si llegaban a perder el campeonato a manos del Real Madrid recaería en él debido a sus múltiples errores; y por supuesto a una serie de jugadores increíbles que se convirtieron en los hombres claves del entrenador argentino para llevarse el trofeo del campeonato español.
Claro que entre los futbolistas más importantes destacan hombres como Jan Oblak, Koke y, sobre todo, Marcos Llorente; pero no cabe duda que uno de los jugadores que se convirtió en figura para este Atlético de Madrid, llegó de sorpresa y como toda una bendición para Simeone; ese no es otro que Luis Suárez. El uruguayo se transformó en pieza clave con sus goles, los más importantes los últimos dos, en las dos jornadas finales, para permitirle al conjunto rojiblanco conquistar el título de LaLiga Santander. Lo cierto es que el charrúa vino casi regalado por un FC Barcelona que lo consideraba «acabado», esto más que nada por Josep Maria Bartomeu, y que quería terminar con esa relación que tenía con Lionel Messi en el vestuario. No obstante, ese regalo sirvió para llevarse el título y el técnico argentino quiere repetir la fórmula con otro descarte azulgrana.
Coutinho es uno de los elegidos de Simeone
Dentro de su pensamiento, Simeone considera que la ecuación en la que recibe a un jugador del Barça podría funcionar una vez más; así que en esta ocasión se ha fijado en otro descarte azulgrana, en este caso en Philippe Coutinho. Para el argentino, el mediocampista brasileño sería un buen reemplazo de Saúl Ñiguez, que según varios medios saldrá este verano. El ilicitano estaría cansado de la falta de minutos que está teniendo en el Atlético y el equipo vería con buenos ojos la marcha de un jugador que ya dejó de ser clave para el entrenador. En ese sentido, el reemplazo ideal sería un Coutinho que no cuenta para Ronald Koeman, que viene de múltiples lesiones que lo han mantenido varios meses alejados de la actividad futbolística y del que todos dudan que tenga nivel suficiente para seguir en el Barcelona.
Ciertamente, en otras circunstancias el fichaje de Coutinho sería imposible para el Atlético; pero esta es otra buena ocasión para aprovecharse de la mala situación económica del Barça y de su gran necesidad de deshacerse de otro jugador para intentar quitárselo de las manos. La oferta de Simeone y los dirigentes colchoneros sería de unos 15 millones de euros, según algunos medios; una propuesta que consideran sensata, pues esta es la cantidad que ronda el salario del brasileño. No obstante, en el Atlético tratarían de que se bajará esa cantidad; porque además de ofrecerle la oportunidad de renacer y muchos minutos, tampoco piensan pagarle ese sueldo a un futbolista que viene con tantos problemas. Todo el plan luce genial, aunque el problema sería que el Barcelona no quiere saber nada de darle futbolistas a un rival directo como el equipo rojiblanco; que además tendría un segundo jugador en mente.
Jordi Alba sigue apareciendo como opción
Desde hace un tiempo se viene especulando con la posibilidad de que el Atlético trate de contratar a Jordi Alba; esto debido a que es muy de agrado de Simeone, que busca con desespero un buen lateral izquierdo que se acomode a su esquema de 3-5-2, en el que no tuvo un buen carrilero por la izquierda durante toda la temporada; y también porque el mismo Barcelona le estaría buscando reemplazo. Laporta ha tanteado a varios jugadores y desde hace mucho suena José Luis Gayà para recalar en el club blaugrana, pues consideran que con 32 años ya es hora de que el equipo tenga un recambio de garantías para ese puesto tan crucial en el entramado del juego de la escuadra azulgrana. El problema es que el catalán no sería regalado ni a precio de saldo para el conjunto rojiblanco, pues pedirían a cambio 30 millones de euros.
Además de eso, tal parece que desde Barcelona no quieren hacerle más regalos a rivales directos. La experiencia ya ha sido mala cuando dejan marchar a futbolistas que consideran que ya no aportarán nada y son esos mismos jugadores los que los acaban dejando mal parados. Ya pasó con Luis Suárez, que con sus goles les dio el título de Liga al Atlético; con el propio Coutinho, que se fue cedido al Bayern Múnich y terminó haciendo doblete en la goleada humillante que le hicieron al propio equipo azulgrana, por 2-8; y unos años antes, en la temporada 2013-2014, con David Villa y el conjunto rojiblanco también, que se impuso en Liga con una buena actuación del delantero. Volver a cubrir las carencias de un rival directo no es lo ideal y Laporta no piensa cometer ese error; por lo que si Simeone quiere algún jugador no será del Barça.