El Consejo de la Juventud de España (CJE) ha lamentado que «ha llegado la cuarta ola de la criminalización de los jóvenes», con el ‘macrobrote’ de Mallorca, que ya supera los 1.100 contagios vinculados a viajes de fin de curso a la isla.
«Ha llegado la cuarta ola de criminalización de la juventud antes que nuestro turno de vacunación, se aprovecha cada episodio para situar a la juventud en el foco de la criminalización», ha indicado la vicepresidenta del Consejo de la Juventud de España, Margarita del Cisne.
Aunque ha reconocido que «el brote» de Mallorca «es significativo y no se puede obviar», Del Cisne ha precisado que esta «criminalización» ya ha ocurrido en tres ocasiones anteriores y que son «hechos aislados que se sobredimensionan hasta situar a las juventudes en su conjunto como irresponsables».
Frente a esto, la vicepresidenta del Consejo de la Juventud ha defendido a los jóvenes que son el colectivo de edad «más dispuesto a vacunarse», los que «están sufriendo trastornos de salud mental como consecuencia de la pandemia» así como «las consecuencias económicas».
Por ello, Del Cisne clama contra la «caricaturización» que «nuevamente» se hace de los jóvenes ante este ‘macrobrote’, «como si hubiese solo irresponsables en esa franja de edad».
Además, ha indicado que no solo les preocupa el «tratamiento mediático» sino también «si se siguieron los protocolos» a la hora de informar sobre las medidas de seguridad a los jóvenes que fueron a esos viajes de fin de curso. En este sentido, pide que no se ponga el «foco» solo en los jóvenes sino también en los organizadores de las fiestas y los propios hoteles.
Por otro lado, la vicepresidenta del Consejo de la Juventud ha reprochado a la ministra de Sanidad, Carolina Darias, que «relacionara la mayor proporción de positivos de 15 a 29 años con la relajación de las medidas».
Del Cisne ha afirmado que este sector de la población es en estos momentos «el más desprotegido de la pandemia» porque no se ha iniciado el proceso de vacunación para esta franja de edad. Además, ha defendido que la «mayoría» de los jóvenes siguen llevando la mascarilla y, en todo caso, ha hecho un llamamiento a ser «todos corresponsables».