Llegó el verano y con él las deliciosas cerezas, todos los mercaditos, fruterías, grandes cadenas y hogares se impregnan con ese dulce olor y los cerezos se engalanan con el rojo más vibrante y brillante. El sabor dulce, acidito e incluso medio salado según el tipo de cereza consumida brinda un placer indiscutible al paladar; por ello no es de extrañarse que para la reina Victoria de Inglaterra hayan resultado un exquisito manjar natural.
Del amor de la reina Victoria hacia las cerezas surgieron las que hoy conocemos como cerezas jubilée. El cocinero y escritor francés Auguste Escoffier creó este sencillo dulce de cerezas y helado para festejar el jubileo de la reina; y, ¿Qué mejor manera de agasajarla que hacer un postre con su fruta favorita?
Las cerezas jubilée se popularizaron inmediatamente y su preparación se propagó entre todos los cocineros quienes aprovechan la preparación de las cerezas para acompañar gran variedad de postres. En la actualidad estas dulces cerezas acompañan helados, tartas, pasteles y los más delicados y exóticos cócteles.
Si bien es cierto que comer cerezas frescas es realmente rico, muchos aprovechan el verano y preparan también las cerezas jubilée para degustarlas como debe ser, con un rico y refrescante helado.
Preparar este rico manjar que la naturaleza sabia y bondadosamente nos ofrece, es necesario seguir algunos consejos; para de esta forma garantizar que queden realmente buenas.
¿Cómo obtener cerezas jubilée perfectas?
Obtener unas cerezas jubilée perfectas no es algo complicado, seguir algunos consejos y vigilar de cerca su proceso de cocción por el tiempo adecuado las deja de impacto.
Escoge las cerezas adecuadas
En los diferentes mercadillos podrás encontrar una amplia variedad de cerezas y elegir las indicadas para su preparación, es importante que sepas la forma correcta de comprarlas y sobre todo observa muy bien el estado de las mismas.
Las cerezas dulces son las más recomendadas para preparar el jubilée, las prunus avium son fácilmente recolectadas en los cerezos silvestres y comercializadas por toda España. Escoge cerezas de buen tamaño, bien gorditas y sobre todo de piel firme y brillante. Nunca escojas aquellas que lucen aporreadas, rotas o manchadas.
Recuerda quitarles el hueso
Para disfrutar plenamente las cerezas jubilée, es de suma importancia retirar el hueso a cada una de ellas. Quizás pueda sonar engorroso o difícil, sobre todo porque para prepararlas es necesario que estás estén enteras, sin embargo contrario a lo que piensas deshuesarlas no es nada complicado.
Como bien sabes, es un enorme y agradable placer comer un exquisito postre hasta el final y disfrutar de todas las texturas, sabores y colores presentes. Mientras disfrutas de un rico manjar con cerezas, no será nada agradable encontrarte un hueso en ellas, así que por favor recuerda retirar el hueso antes de prepararlas.
Cuida el nivel de azúcar
Las cerezas jubilée deben estar inmersas dentro de un rico y suave almíbar, por desgracia hay muchos que exageran con el nivel de azúcar añadido y terminan preparando una especie de mermelada, así que ten en consideración el tipo de postre que deseas como resultado final.
No descuides el tiempo de cocción
Para preparar este tentador dulce que enamoró hasta a la reina Victoria y que se ha colado en el corazón de consumidores de todo el mundo celebrando hasta su propio día cada 24 de septiembre, el tiempo de cocción es un factor clave.
Las cerezas jubilée deben quedar firmes y tiernas. Nunca deben quedar excesivamente blandas o con consistencia de compota, cada una de ellas debe estar inmersa en el almíbar y lucir por separado nunca empegostadas.
El tiempo total de cocción no debe exceder los 10 minutos, los cuales deben estar distribuidos en 5 minutos a fuego medio-bajo para formar el almíbar y 5 minutos finales a fuego alto para terminar la cocción de las cerezas y dar cuerpo al almíbar.
Según el tamaño que tengan las cerezas debes ajustar el tiempo de cocción; las más recomendadas son las cerezas bien gorditas y carnosas, para estas el tiempo de cocción de 10 minutos totales quedará perfecto; ahora bien, si por alguna razón prefieres cerezas más pequeñas, debes vigilar aún más de cerca el proceso y apagarlas apenas este completado el almíbar.
Flamear o no flamear
Tradicionalmente las cerezas jubilée son flameadas con Kirsch o Brandy, algunas condiciones aplican en aquellos casos en los que serán servidas para los niños. La decisión de flamear o no es completamente acorde a la necesidad del comensal.
En caso de flamear, recuerda tener siempre presentes las medidas de seguridad necesarias.
- No es recomendable flamear sobre la hornilla; en caso de hacerlo apaga la campana extractora.
- El licor debe estar a temperatura ambiente, nunca frío.
- Ten a la mano una tapa grande como precaución.
- Utiliza un fósforo largo para chimeneas.
- Observa muy bien si el alcohol se evaporó por completo.
Para un flameado perfecto, retira las cerezas de la hornilla, agregue el kirsch o brandy encienda y mueva suavemente hasta que las llamas disminuyan. Este proceso no excede lo 45 segundos.
Cómo servir las cerezas jubilée
Una vez listas las cerezas, estas deben servirse de forma inmediata sobre un cremoso helado de vainilla.
No desaproveches las cerezas que te sobren; estas, puedes reservarlas en un envase debidamente esterilizado y cerrado herméticamente dentro de la nevera. Al momento que desees consumirlas puedes optar por calentarlas un poco o servir frías.
Aprovecha los beneficios de las cerezas
La cereza es una fruta muy saludable, tiene un alto contenido de antioxidantes y previene las enfermedades cardíacas y algunos tipos de cáncer. El consumo de esta pequeña fruta contribuye a mantener estables los niveles de azúcar en la sangre; eso sí, en el caso de las jubilée, al contener altos niveles de azúcar debes consumirlas con moderación.
El contenido de vitaminas A, C, E, así como potasio, hierro, magnesio, ácido fólico y fibra, la hacen una aliada perfecta para los problemas de memoria, la artritis e inflamación; así mismo, esta fruta es una excelente aliada de la belleza, mejora el cabello, las uñas y la piel, mientras que consumida como merienda contribuye a la pérdida de peso al aportar tan solo 48 calorías por cada 100 gramos.
Disfruta de las dulces cerezas ahora que están en su mejor tiempo y degústalas como prefieras sin cometer errores.