Sustantivo friki, plural frikis, y en inglés freaky. Es una palabra española que define: freak, weirdo, geek, nerd, guru, otaku, mangaka, comic like, book reader, videogame player, film lover y cualquier otra persona cuyas aficiones no sean los coches, las chicas y el fútbol.
Puede que solo te gusten las películas, pero como «friki» te gustan todas las demás cosas, te ves raro o actúas torpe.
FREAK
Freak que a su vez proviene de Freak show, la parte terrible de los espectáculos de circo de antaño donde mostraban a personas que estaban deformadas o que no eran aceptadas como personas normales.
Hoy en día, si llamamos a alguien un fenómeno es muy insultante y ofensivo, como llamar a alguien un fenómeno de la naturaleza: antinatural. No tiene el mismo significado que friki en español.
Freak Show se trataba de un grupo de personas inusuales (algunas físicamente discapacitadas, otras mentalmente discapacitadas, con trastornos genéticos, etc.) que fueron utilizadas como exhibiciones en un circo, como animales.
Freak en inglés no es una cosa fácil para llamar a alguien, implica que no es tan bueno como los demás y que algo anda mal con ellos.
La gente de esta película y de aquellos viejos programas de Freak hoy en día sería parte de la sociedad y aceptada, con tratamiento para problemas mentales o ayuda para desafíos físicos. Pero, por supuesto, todavía habría alguien que mira fijamente a la gente en la calle.
GEEK
Geeks, en general, se refiere a las personas que aman los videojuegos, la ciencia ficción, los libros y películas de fantasía, la tecnología y que han visto todas las series de Star Trek, etc. Entonces geek podría ser la traducción de friki.
NERD
El nerd es como un friki, pero pone más énfasis en el hecho de que la persona estudia mucho. Tienen las mejores notas de su clase y, a menudo, no se preocupan tanto por su imagen y estilo.
FANÁTICOS DEL ANIME Y LA SUBCULTURA FRIKI
Si durante una reunión familiar compartes tu afición por la animación japonesa con otros miembros de la familia. Su respuesta será simple pero bastante reveladora: así que eres un raro, entonces, eres un fenómeno o estás friki.
Perplejo, desmotivado y sin las palabras para explicar por qué su opinión estaba equivocada, quizás quieras preguntar por qué piensan tan negativamente del anime. Sin embargo, no escucharás una explicación razonable y nunca podrás responder adecuadamente a sus críticas.
En Japón, desde anuncios hasta logotipos corporativos, uno está literalmente rodeado por un exceso de iconografía de anime. Sin embargo, en otros países, el anime rara vez se ven.
Para entrar en contacto con el anime, fuera de Internet, a menudo hay que buscar tiendas especializadas. Esta falta de exposición significa que el anime generalmente se ve como infantil y pervertido, mientras que los fanáticos generalmente se asocian con la ineptitud social y la rareza.
SUBCULTURA DEL ANIME LLAMADA FRIKI
Esta visión es tan común y arraigada que ha surgido una subcultura del anime llamada friki, un término que deriva de la palabra inglesa «freak».
Estrechamente relacionado con su homólogo japonés, el infame otaku, los friki son aficionados extremos y fanáticos, entre otras cosas, del anime. Sin embargo, los friki poseen algunas peculiaridades propias.
Abarcan varias otras subculturas, incluidos los excursionistas y los jugadores, y han ganado suficiente impulso para reunirse en una marcha del orgullo que se lleva a cabo todos los años en muchas ciudades, donde se los puede ver vestidos como sus personajes favoritos y marchando por las calles. La vista es colorida y bien… extraña. Como Pokémon en el tercer mundo.
En esencia, los friki son aficionados cuyo comportamiento y gustos difieren mucho de los de la corriente principal.
Parecen exhibir orgullo por su marginación, una actitud fácilmente glamorizada por Friki Plaza, un mercado dedicado al comercio de parafernalia especializada de la cultura pop en diferentes estados de México, por ejemplo.
Operando bajo el lema todo, menos normal — todo, excepto normal — Friki Plaza encapsula el sentido de anormalidad juvenil que se manifiesta en la identidad friki. En la Ciudad de México, Friki Plaza consta de varios pisos llenos de anime, videojuegos, tarjetas, puestos de comida y otros artículos coleccionables.
En cierto modo recuerda a las tiendas de Akihabara, el conocido distrito de Tokio dedicado a la venta de productos electrónicos y de la cultura pop. Comúnmente conocida como «ciudad eléctrica», Akihabara surgió como un punto de interés para los otaku en la década de 1980 después de que comenzó a satisfacer sus intereses.
Pronto se posicionó en el centro de la subcultura. Hoy en día, se considera un lugar de peregrinaje para los otaku que viven fuera de Japón. Sin embargo, las diferencias entre las tiendas de Akihabara y Friki Plaza son obvias.
Por lo general, la selección en Friki Plaza está bastante anticuada: títulos como Dragon Ball y Pokémon siguen en demanda, mientras que el piso superior hentai (porno) que se ha vuelto notorio entre los turistas desprevenidos se nota que falta. A diferencia de Akihabara, han proliferado los DVD pirateados, así como la parafernalia barata e ilegal de dudosa calidad.
