Los presidentes de Galicia, Andalucía, Valencia y Baleares han apostado este jueves por que se acuerde una modificación del sistema de financiación de las Comunidades Autónomas.
Lo han defendido en el acto ‘El modelo territorial para mejorar la economía española’ en la XXXVI Reunión Cercle d’Economia, en el que ha participado el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo; el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla; el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, y la presidenta del Govern Balear, Francina Armengol.
El presidente Gallego ha exigido no pensar solo en los ingresos sino también en los gastos y ha llamado la responsabilidad de los presidentes de las Comunidades Autónomas a la hora de decidir en qué gastan los recursos, pero se ha abierto a debatir un nuevo modelo: «A favor de volver a verlo, de volver a sentarnos».
Ha recordado que el sistema de financiación afloró de un pacto entre el PSOE y el tripartido en Catalunya, ha dicho que pese a ello puede entender que ahora en Catalunya no estén de acuerdo con él, pero ha pedido que el criterio para el reparto de recursos no sea el número de habitantes sino el coste efectivo del servicio y ha puesto como ejemplo que no es lo mismo el gasto sanitario en un anciano que en un joven.
Moreno Bonilla ha argumentado que el sistema de financiación autonómico no satisface a ninguna comunidad y ha insistido en que su revisión es una cuestión urgente: «No podemos esperar más».
Para hacerlo, considera hará falta «mucha audacia, generosidad y ser un tanto atrevido», ha confiado en que se podrá hacer un modelo en el que quepan las demandas de todas las autonomías, pero ha defendido la necesidad de mantener la autonomía fiscal de cada comunidad.
El presidente de Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ve de una «exigencia absoluta» la reforma del actual sistema de financiación de las comunidades autónomas para poder gestionar el estado del bienestar y garantizar la equidad en todo el país, y ha negado que España no pueda pagar sus servicios.
«Si no se actualiza se derivarán otros problemas. Es necesario poner esta cuestión sobre la mesa y no solo pegar el pelotazo hacia arriba. Es necesario el diálogo porque, por ahora, solo hay consenso en que hay que cambiar el sistema, pero no hacia dónde ir», ha añadido Puig.
Armengol considera que el Gobierno central tiene buena predisposición para reformar el sistema de financiación, porque cree que entiende la pluralidad de España, y cree que Catalunya debe participar en el debate: «Es bueno que Catalunya se sume a este debate multilateral», ha invitado la presidenta.
Ha lamentado que haya comunidades autónomas infrafinanciadas, ha asegurado que Baleares quiere seguir siendo solidaria pero cree que esto se debe corregir, tras lo que ha criticado que no haya corresponsabilidad fiscal y «quien está más beneficiada es Madrid, y se deben fijar unos mínimos para marcar la competitividad en términos sanos».
CUPO VASCO y NAVARRO
Preguntados por si País Vasco y Navarra deben ser más solidarias, el presidente gallego ha sostenido que España no está en estos momentos para hacer una enmienda a la totalidad, pero sí se ha mostrado partidario de «transparentar el cupo».
«Si el pacto es que usted recauda y hay una parte que tiene que pasar al conjunto del país, es razonable que diga qué parte se pasa y qué parte no se pasa», ha dicho, y ha destacado que los grupos vascos en el Congreso negocian el cupo en base a que son determinantes en la aritmética parlamentaria de la Cámara Baja.
También en relación a la armonización fiscal, pero a diferencia de Feijóo, Puig ha dicho que «no puede haber ningún tipo de privilegio» por parte de ninguna comunidad autónoma y que se debe avanzar para encontrar un sistema más ajustado a los tiempos actuales, en sus palabras.
Armengol ha dicho que respeta el cupo vasco y navarro porque así está recogido por la Constitución, pero ha añadido que la Carta Magna también recoge que se debe «compensar la insularidad» y ha criticado que actualmente no sea así.