El Rey y Aragonès se saludan en un encuentro de empresarios en la reunión del Círculo

El Rey y el presidente del Govern, Pere Aragonès, se han saludado este miércoles durante una reunión informal con empresarios en el marco de la reunión anual del Círculo de Economía, en el Hotel W de Barcelona.

El jefe del Ejecutivo catalán no ha participado en la recepción del Rey cuando el monarca ha llegado al hotel, pero minutos más tarde Aragonès ha salido a la terraza donde estaba Felipe VI junto a empresarios y otras personalidades políticas y han coincidido.

Aragonès, junto a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, el Rey, la vicepresidenta de Asuntos Económicos del Gobierno, Nadia Calviño, la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, y el presidente de Corea del Sur, Moon Jae In, han mantenido una conversación grupal durante más de dos minutos.

Tras este encuentro, el Rey, Aragonès, Colau, Calviño, Maroto, Jae In y el presidente del Círculo de Economía, Javier Faus, han posado en una foto.

Fuentes de Presidencia de la Generalitat han explicado que, durante el besamanos al Rey, Aragonès se ha quedado en un reservado del hotel y, una vez finalizado, Aragonès, Colau y la consellera de Presidencia, Laura Vilagrà, y la de Acción Exterior, Victòria Alsina, han salido a la terraza y se han encontrado con la comitiva de Felipe VI y Jae In.

Estas fuentes han calificado de espontáneo y frío el encuentro entre el presidente catalán y el Rey, ya que aseguran que solo se han intercambiado un ‘hola’, mientras que ha hablado con el presidente coreano «de la relación histórica de Corea del Sur con Cataluña y de la inversión de empresas coreanas en Cataluña.

Otras fuentes presentes en el encuentro han circunscrito en la «cortesía» el saludo entre Aragonès y el Rey, y coinciden en que no han mantenido una conversación más allá del saludo.

Posteriormente, Aragonès se ha marchado del hotel, ya que no participa en la cena de inauguración de la reunión del Círculo de Economía en la que la consellera de Presidencia, Laura Vilagrà, y la de Acción Exterior, Victòria Alsina, han representado a la Generalitat.

La asistencia a esta cena provocó una polémica el martes entre los socios del Govern porque primero Aragonès la delegó en el vicepresidente, Jordi Puigneró, que en un inicio aceptó pero después lo rechazó, y finalmente se anunció que iría Vilagrà (ERC), aunque también lo ha hecho Alsina (Junts), pese a que no estaba previsto.

CAMBIO DE RELACIONES

Este gesto entre el Rey y Aragonès supone un acercamiento entre la Casa Real y la Generalitat, que había roto relaciones con Zarzuela tras el discurso de Felipe VI el 3 de octubre de 2017, dos días después del 1-O.

Aragonès da un vuelco a la política de relación institucional de la Generalitat con respecto a su predecesor, Quim Torra, que había decidido que el Govern no participaría en actos a los que asistiera el regente.

El gesto de acercamiento institucional se enmarca dentro de la estrategia de Generalitat y Gobierno de rebajar tensiones y que tendrá su próximo capítulo en la reunión de Aragonès con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para la que éste quiere tener aprobados los indultos a los impulsores del 1-O encarcelados.

El Govern decidió el martes cambiar el criterio de los últimos años y acudir a cualquier acto que considerara importante aunque esté el Rey, porque considera que la agenda del Govern no debe estar «condicionada» por la del monarca.

Sin embargo, han querido evidenciar que las relaciones no se han normalizado del todo evitando participar en la recepción del regente, algo que ha compartido con Colau, que nunca participa en recepciones ni besamanos del Rey, pero siempre lo saluda o habla con él.