La cláusula de conciencia es un derecho que tienen los periodistas para poder garantizar su independencia a la hora de ejercer su trabajo. Esta cláusula es una protección para los profesionales de la información limitando los abusos de las empresas editoras o la dirección de los medios en los que estos trabajan ante los intentos de manipular la información con fines políticos o particulares. De modo que yendo un poco más lejos, la cláusula de conciencia garantiza también el papel de los periodistas como elemento fundamental en los estados democráticos. Garantizando la posibilidad de transmitir la información de manera libre y plural.
4Los orígenes de la cláusula de conciencia
La cláusula de conciencia fue reconocida en nuestro país con la aprobación de la Constitución Española de 1978. Se trata de un derecho que fue recogido en el Capítulo II del Título I de la Norma Fundamental, de modo que goza de la categoría de derecho fundamental. Esto fue algo revolucionario en el derecho constitucional europeo donde por lo general era un derecho reconocido mediante ley (Francia) o mediante Convenio Colectivo (Italia).
Podemos encontrar el primer precedente de la cláusula de conciencia en la Italia de 1901, en el llamado caso Morello. Es el momento en el que los periódicos se están transformando en empresas. Ante un cambio de propietarios en la empresa que conlleva un cambio de ideología, el periodista Morello solicita ante los tribunales una indemnización y el Tribunal Civil de Roma le da la razón. Se trató de un caso aislado, del empeño de un periodista valiente que dio lugar al nacimiento del convenio colectivo de 1919.