Las gambas son uno de los mariscos más habituales en la mesa. Y estos animalitos son la compañía perfecta de multitud de platos por su jugosa carne. Pero lo más engorroso para disfrutar de ellos es pelarlos, sobre todo cuando son pequeños.
Cuando están en una fideuá o en una paella de marisco, mucha gente las deja sin comer para no pringarse pelándolas. ¡Menudo desperdicio! Aunque su sabor ya está presente en el plato, hay que comerlas para disfrutar al completo de este marisco. A continuación, te mostramos el truco definitivo para pelar las gambas en tres segundos.
2¿GAMBAS FRESCAS O CONGELADAS?
En el supermercado puedes escoger entre comprar gambas frescas o congeladas. Normalmente estas últimas tienen un precio más bajo, pero tienes que mirar si no contienen aditivos que favorezcan su conservación. Varios estudios han alertado sobre el abuso de sulfitos y aditivos en los mariscos congelados.
Lo ideal sería que compraras las gambas frescas, ya que mantienen todos sus nutrientes intactos. Aunque las compres frescas, puedes congelarlas si no las vas a consumir en los próximos días. Después, solo tendrías que descongelarlas y cocinarlas del mismo modo que si estuvieran frescas.