El Cabildo de Tenerife y sus trabajadores y trabajadoras se han concentrado hoy viernes en la puerta principal del Palacio Insular en señal de luto para manifestarse por las terribles noticias en relación con las niñas Olivia y Anna y como muestra de apoyo y solidaridad hacia su familia.
El presidente del Cabildo, Pedro Martín, manifestó que es «muy difícil que todo Tenerife, Canarias y España entera no esté consternada» y se preguntó «cómo puede haber alguien tan ruin y tan mezquino como para hacer lo que ha hecho». Afirmó que esto es «una nueva muestra en la necesidad para seguir trabajando en todos los ámbitos por educar, por formar, por evitar que situaciones como estas se vuelvan a producir».
La vicepresidenta segunda del Cabildo, Berta Pérez, apeló «a todos los hombres y mujeres de Tenerife y decirles que no nos podemos quedar en el dolor, en la desesperanza. Tenemos que pasar a la lucha, una lucha tranquila, la que se hizo contra el terror etarra y el terror islamista, la lucha que se hizo con manos blancas en todas las calles del país. Que todo Tenerife, toda Canarias y toda España se llene de manos violetas ante este terror».
Añadió que «tenemos que luchar con esas manos violeta en todo el país. No nos quedemos solo con el dolor. Con el dolor de Olivia, de Anna y de Beatriz», y envió un mensaje para concluir: «Beatriz, todos y todas estamos contigo. Tenerife entero vestido de violeta para luchar contra el terrorismo machista, contra el asesinato».
Por su parte, la consejera de Acción Social, Marián Franquet indicó que «el Cabildo tomó la decisión no hace demasiado tiempo de cambiar el silencio por el ruido, que han sido las sirenas que hemos escuchado», y apuntó que «pensamos que a lo mejor el silencio no era la mejor manera y lo que teníamos que hacer era gritar».
Franquet señaló que «este Cabildo, que representa a la ciudadanía de Tenerife, quiere que ese grito se transforme hoy en un abrazo, en un abrazo inmenso, en un abrazo a la madre, a Beatriz, en un abrazo a la familia, a la gente que quiere a Beatriz y a sus hijas, y en un abrazo a una sociedad que hoy está herida. Y nos han matado a todos y todas un poquito».
«No nos conformemos, no miremos para otro lado, no justifiquemos, porque no nos queremos volver a ver en una situación como esta», y concluyó «agradeciendo a todo el personal del Cabildo que está aquí, todos los participantes, cargos públicos, representación de los partidos políticos… porque hoy es uno de esos días en los que las ideologías pasan a un tercer, cuarto, quinto plano, donde los y las representantes públicos nos tenemos que sentir más unidos que nunca, porque es la única que forma que tenemos de que realmente ese abrazo llegue».