El secretario general de Vox y portavoz de la formación en el Ayuntamiento de Madrid, Javier Ortega Smith, ha cargado contra el «negacionismo político» ante «delitos de odio» cometidos contra su partido.
Lo ha hecho en la reunión de la Junta Local de Seguridad, presidida por la delegada del Gobierno en Madrid, Mercedes González, en la que ha trasladado su preocupación por la comisión de delitos con repercusión en la «convivencia, la paz y la seguridad democrática», amparados en un «negacionismo frente a los delitos de odio político».
Con ellos se ha referido a lo sucedido en la campaña electoral del 4M, «donde la tercera fuerza política de España se vio acosada de forma brutal», con ataques «con palos y piedras en Vallecas».
«TOLERANCIA POLÍTICA» A ESTE TIPO DE AGRESIONES
«Esta violencia de odio político tuve el amparo y la acogida de diversos grupos políticos porque hay una especie de tolerancia a estas agresiones, que se justifica porque dicen que algunos no tenemos derecho a hablar», ha condenado el también diputado nacional.
También ha trasladado a la Junta Local de Seguridad los problemas de okupación de inmuebles, tanto públicos como privados, lo que deviene en la «desesperación de los propietarios y de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, que «no tienen armas legales ni apoyo ante la invasión del derecho fundamental de la propiedad».
Smith se ha preguntado si la ciudadanía «no tiene derecho como Pablo Iglesias a que no le okupen Galapagar» y ha puesto el ejemplo de «un caso», el de una mujer que «fue a hacer la compra y cuando volvió le habían okupado».
«¿Y si fuera su piso?», le ha preguntado a un periodista. Detrás de los «tipejos» del movimiento antiokupación ha situado a «determinados grupos de extrema izquierda, a los que probablemente nunca le hayan okupado su casa».
Igualmente ha trasladado la problemática del top manta, «que arruina con mercancía ilegal a muchos negocios», y la violencia «que ejercen algunos ‘menas’ (menores no acompañados), en sitios cercanos a lugares de acogida, como Hortaleza o la Casa de Campo». También ha señalado al aumento de los ciberdelitos con la pandemia, el incremento de hurtos en el Metro o en el barrio de Ibiza (Retiro), y la proliferación de narcopisos.
«NEGACIONISMO DE LA VIOLENCIA INTRAFAMILIAR»
Otro de los focos lo ha puesto en lo que denomina «el negacionismo de la violencia intrafamiliar». Ortega Smith ha criticado lo que considera que es «una gran mentira, la violencia de género, porque la violencia no tiene género. La pueden sufrir hombres y mujeres, heterosexuales y homosexuales».
«Basta ya de criminalizar a todos los hombres llamándolo violencia machista», ha reclamado, después de intentar explicar que si un hombre maltratara a una mujer por el mero hecho de serlo, entonces «pegaría a todas las mujeres que encontrara por la calle».
Vox, en palabras de su secretario general, «no niega que exista la violencia contra la mujer» sino que matizan que «hay muchas mujeres a las que la ley no protege porque su violencia proviene de su pareja lesbiana», lo mismo que sucede «en el ámbito familiar contra menores» o la violencia que sufren padres y abuelos.
Lo que dice su partido es que «hay que combatir todos los tipos de violencia, aunque algunos casos sean estadísticamente menores que otros». Ortega Smith ha justificado que si sólo se atiene a los números delitos como los homicidios no se investigarían al ser menores que otros, como los hurtos, por ejemplo. Esto le ha llevado a remarcar que «cualquier español tiene derecho a la protección legal».
En todo caso, Ortega Smith ha defendido que Madrid «es una ciudad segura» y para eso ha planteado que se comparen los homicidios con los que se producen en otros puntos del planeta, «como el paraíso de Caracas, donde en un fin de semana se asesina a 40 o 50 personas».
El portavoz de Vox ha terminado su intervención reclamando más medios para los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, además de mayor cobertura legal.