El chicle, probablemente la golosina más famosa a nivel mundial y la preferida por grandes y pequeños. También llamada goma de mascar, esta especie de dulce elástico ha sido el favorito de las tiendas de dulces a nivel mundial.
El chicle ha sido el predilecto para los niños, porque es una goma que puedes masticar una gran cantidad de veces. Sigue dulce y puedes incluso hacer especie de bombas con el. Ya sea por disfrute o incluso para controlar la ansiedad, el chicle es uno de los mayores inventos en la industria del dulce.
Lea TAMBIÉN: CÓMO SE HACE UN ANÁLISIS MÉTRICO
Se dice que el chicle fue un invento de origen mexicano, pues siempre ha estado presente en dicha cultura desde tiempos prehispánicos. Muchos pueden cuestionar este genial invento, sin embargo los historiadores apuntan a México como la cuna del chicle.
Otro aseguran que el chicle era conocido como tzicli y fue descubierto específicamente por los mayas. Una golosina que según algunos fue un obsequio de México para el mundo entero. Aunque se desconoce si realmente proviene de México , la verdad es que el chicle lidera las opciones en cuanto a golosinas.
Datos que seguro no sabías acerca de la creación del chicle
Tal como hemos mencionado, varios apuntan a México como la cuna real del chicle, pero otros cuestionan un poco la historia. Pues parte de ella también asegura que el origen de esta golosina también se podría decir que fue en el antiguo Egipto y en la antigua Grecia.
Algunos apuntan que es probable también que sea cierta esta versión, ya que en la prehistoria, se conoció que ya se mascaba directamente plantas y resinas de árboles. Estos gozaban de propiedades medicinales y las personas mascaban las plantas para extraer sus beneficios.
Sin embargo, los fieles creyentes del chicle y su deliciosa particularidad, aseguran que el chicle que se conoce a nivel mundial fue nacido en México. Específicamente en la zona norte de Centroamérica.
Los defensores de esta versión aseguran que este invento nació en un área denominada el Gran Petén, donde surgió la cultura Maya hace ya más de dos mil años. Fueron los mayas, quienes a juicio de los historiadores, iniciaron la recolección de unos de los árboles más abundantes.
Este árbol llamado chicozapote, era uno de los más abundantes de la zona. Y era justamente este árbol el que daba una especie de chicle. Para poder obtener este especie goma, los mayas hacían cortes en la corteza en forma de Z. Y luego brotaba la savia que era recogida en cuencos colocados en la base del árbol.
Goma nacida de un árbol
Tras un leve y sencillo proceso de secado, se obtenían una especie de goma de mascar, que era empleado para limpiar la boca y los dientes. De hecho, este especie de chicle también fue usado para «engañar» el estómago durante la realización de rituales en ayunas.
El nombre que recibió fue sicte, cuyo significado es fluido vital o sangre. Al poco tiempo lo utilizaron para comerciar con otros pueblos mesoamericanos.
Mientras que la historia solo detalla esto, los inventores del chicle tampoco están muy claros. Pues muchos historiadores aseguran que no se conoce con exactitud el padre de la gasolina más popular del mundo.
Los historiadores aseguran que existen varias teorías al respecto. Algunas de ellas son que para el año 1848, aparece el denominado «State of Maine Pure Spruce Gum» que fue inventado por John Curtis. Una especie de chicle.
Pero también aseguran que fue el mexicano Antonio López de Santa Ana quien en 1860, dio pie a la comercialización. Por lo tanto muchos alegan que es complejo decir que hay alguien que lo haya inventado, pues básicamente fue un descubrimiento a raíz de la naturaleza. Es decir que el chicle básicamente proviene de lo natural.
¿Cómo se hace el chicle?
El chicle está compuestos de plástico (base de goma), resinas naturales y sintéticas, azúcar, suavizantes, colorantes y aromatizantes naturales y artificiales.
Algunas empresas fabricantes de dulces pueden incluso hacer chicle también, añadiendo carbonato de calcio o el silicato de magnesio. Suavizantes (compuestos como el aceite vegetal), emulsionantes, y elastómeros.
El chicle es un producto no ingerible ni soluble en agua. Aunque, como ya mencionamos, los fabricantes partieron desde la savia que brotaba del popular árbol chicozapote, también es cierto que fue reemplazado.
Los fabricantes dejaron de usar la savia del popular árbol originario de las selvas tropicales de México, y lo sustituyeron por acetato polivinílico y plástico neutro. U otro polímero como base gomosa, al ser un producto más económico para los empresarios.
En cuanto a su preparación, cuando ya se tiene la resina, se hierve en una olla llamada “paila” para quitarle la humedad. Luego, se remueve constantemente hasta que tenga una consistencia chiclosa, para después ser colocada en moldes de madera “marquetas”.
Se prepara agregándole aditamentos esencia, color y saborizantes para mejorar su sabor y consistencia.
