En el 2019, Luis Enrique sorprendió a todos al dejar la selección de España por problemas personales, pero más increíble fue ver a Robert Moreno, segundo entrenador del asturiano, ser nombrado por la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) como el nuevo seleccionador del combinado nacional. La falta de experiencia en la élite y más aún, sin haber ejercido como primer entrenador hicieron desconfiar a muchos; pero al estratega catalán lo respetaban mucho los jugadores, pues como segundo de Luis Enrique realizó un estupendo trabajo. Con eso y al ver como se hizo cargo del equipo en la victoria frente a Malta en las eliminatorias camino a la Eurocopa 2020, Luis Rubiales decidió dejarlo en el cargo. La sorpresa no hizo más que aumentar al ver no solo que los resultados acompañaban al equipo, sino que también este desarrollaba un fútbol atractivo que dio buenos frutos.
Para Robert Moreno no fue nada fácil tomar al seleccionado de España y conducirlo de forma brillante durante todo el proceso de clasificación a la Eurocopa. Durante los nueve partidos que dirigió obtuvo siete victorias y dos empates, con grandes picos de rendimiento. Claro que tomó alguna de las bases que dejó Luis Enrique; pero las transformó poco a poco con su toque personal para darle algo más de profundidad. Ese técnico que comenzó su camino a los 14 años y luego se especializó como analista de los vídeos de los partidos, ahora llegaba a la cima del fútbol español tras un camino con el asturiano que inició en el 2008 con el Barcelona B; luego seguiría la Roma, Celta y Barcelona. Y aunque se alejó para ser segundo de Unzue en el Celta; en el 2018 volvió con Luis Enrique para dirigir a España, hasta su triste separación.
La aventura en Francia no funcionó
Pese a que su aventura en España fue buena, esta duró poco. Tras sellar la clasificación de la selección española a la Eurocopa y ganar su último duelo ante Rumania (5-0), la RFEF trajo de vuelta a Luis Enrique y desechó de mala manera al técnico que había hecho todo el trabajo para clasificar al equipo. Con al vuelta del asturiano, el trabajo de Robert Moreno quedó en nada y todo empeoró con esa pelea que tuvo con Luis Enrique en la que volaron declaraciones de un lado y de otro. La deslealtad y el maltrato fueron los temas que más se trataron, pero al final el resultado fue que el catalán dejó el cargo y se separó del cuerpo técnico del asturiano. Después de liderar a España y salir por la puerta de atrás muchos pensaron que su carrera terminó; no obstante, su calidad lo llevó a Francia.
Sus buenas presentaciones no pasaron desapercibidas y el AS Mónaco lo eligió para que se hiciera cargo del primer equipo en diciembre de 2019. Esta representaba la primera ocasión que fungía como primer entrenador en un club; sin embargo, la experiencia no fue muy alentadora en la Ligue 1. Cuando tomó el equipo del Principado este se encontraba en la séptima casilla; lo dirigió durante 13 partidos con un balance de cinco victorias, tres empates y cinco derrotas. Unos números que se podrían evaluar de una mejor forma; pero como el Mónaco buscaba resultados inmediatos y el equipo acabó noveno, no tuvieron la paciencia suficiente y en julio de 2020 lo despidieron. Sin mucho tiempo para trabajar y con la presión de resultados, Robert Moreno acabó así su primera experiencia en los banquillos de un club y desde entonces ha estado sin entrenar; algo que puede finalizar muy pronto.
Robert Moreno tendría su futuro en Granada
Desde hace casi un año que Robert Moreno no entrena a ningún equipo, pero todo puede cambiar en las próximas horas al estar el Granada sin entrenador y desesperado buscando uno. La renuncia de Diego Martínez agarró por sorpresa a todos en el conjunto andaluz; no obstante, tras tantos años y tantas alegrías no hay nadie que se atreva a reprocharle algo, todo lo que hacen es agradecerle. El problema es que sin entrenador, las decisiones de cara a la próxima campaña están paralizadas; porque a pesar de tener la plantilla casi confirmada, necesitan hacer algunos cambios y para eso debe llegar el nuevo estratega. Varios nombres han surgido, pero el que se eleva como favorito es el del catalán, que estaría encantado de regresar a los banquillos; más aún si lo puede hacer con un club con mucho potencial como lo es el Granada.
Esta sería una gran oportunidad para Robert Moreno, pues ambas partes parecen destinadas a encontrarse al tener objetivos similares. El club rojiblanco necesita un entrenador lo más pronto posible y que tome decisiones rápido; allí es que cae muy bien el catalán, que está en la búsqueda de un equipo que le permita mostrar su calidad nuevamente y que tenga ganas de formar un proyecto duradero que pueda crecer, el Granada tiene todo eso. El segundo entrenador de Robert Moreno, Dani Guindos, quien muy probablemente lo acompañará en su aventura en el equipo andaluz, ya estuvo en Granada para observar las instalaciones de la Ciudad Deportiva, lo que da indicios de que el acuerdo se acerca. Luis Enrique no solo tuvo problemas con Sergio Ramos y otros jugadores, también a Robert Moreno lo dejó mal; pero ahora tendrá otra oportunidad de mostrar su valor y en Granada puede lograrlo.