El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, ha insistido este martes en el Pleno del Senado en la necesidad de «naturalizar» los indultos y ha asegurado que «los tiempos de la justicia terminaron con la sentencia firme y la ejecución de la misma» y que «ahora corresponden los tiempos de la política, porque así lo dice la Constitución del 78».
Campo ha respondido así a la interpelación del senador del Grupo Parlamentario Popular Fernando Martínez-Maíllo, quien ha preguntado al ministro sobre la política del Gobierno en relación con los indultos y ha reprochado la actuación del Ejecutivo de cara a las peticiones de los presos condenados por el ‘procés’.
El titular de Justicia ha recordado nuevamente que los indultos son una medida de gracia a discreción del Gobierno y que tomará una «decisión prudente y razonada». En este sentido, ha recordado que las solicitudes de los líderes catalanes «todavía están en tramitación» y que sería «inoportuno» si se pronunciara al respecto.
«VALORAR EL CONTEXTO»
El ministro ha asegurado que en el marco del análisis de las peticiones recibidas «resulta obligado valorar el contexto y las implicaciones políticas». «Sea cual sea la decisión que se tome es evidente que no puede dejar de valorarse la compleja y tensa situación política que vivimos desde hace ya bastantes años», ha precisado.
Ha insistido en que «en todo lo relacionado con la situación política en Cataluña» se debe hacer «lo posible» para que el futuro traiga consigo un «escenario de diálogo y entendimiento» en el «que las discrepancias vuelvan a resolverse». Y ha asegurado que «ahí es donde está situado este Gobierno».
En términos generales ha defendido que la medida de gracia es una «especie de válvula de escape que necesitan los países para mitigar efectos de distinta índole» y ha asegurado que en los últimos años «se ha limitado enormemente». En concreto, ha indicado que la cifra anual ha descendido de los 1.937 indultos concedidos en 2000 hasta los 30 de 2020.
«UN INDULTO POLÍTICO»
Fernández-Maíllo ha reprochado la actuación del Gobierno y la respuesta de Campo, quien –según ha dicho– ha acudido al Senado a «hacerse el sueco».
Sobre los indultos, ha asegurado que «es una decisión que lleva tomada desde hace muchísimo tiempo» y ha recriminado al ministro por estar «comprando el discurso independentista».
En su turno de intervención, el senador ha indicado que lo que pretende el Ejecutivo de Pedro Sánchez es dar «un indulto de carácter político». Ha dicho que se trata de «un pacto con los independentistas», de «una decisión profundamente arbitraria» que «quizás tiene su origen en la moción de censura». «Pura corrupción constitucional», ha añadido.
El dirigente ‘popular’ ha recriminado al Ejecutivo porque, a su juicio, quieren darle el indulto quienes «no solo dicen que no se arrepienten, sino que dicen que lo volverán a hacer».
Asimismo, ha asegurado que si el Gobierno concede la medida de gracia a los condenados será como poner una «alfombra roja» al expresidente catalán huido Carles Puigdemont y ha insistido en que el PP va a trabajar para «parar esta tropelía».