Los días pasan y el Real Madrid no deja de ser noticia, menos ahora que Zinedine Zidane decidió sacar esa carta abierta para explicar el motivo de su adiós y se dejaran así las habladurías y mentiras sobre su partida. La verdad es que el francés se fue dejando una herida muy grande en todo el madridismo; porque fue como retroceder en el tiempo, pero mucho más nefasto: en el 2018 el entrenador se fue, aunque lo hizo dejando la tercera Champions League seguida en las vitrinas; en esta ocasión lo hizo sin un solo título. Con ese panorama, esta carta solo afea aún más; esto al ver que en ella no se deja nada bien a un Real Madrid que busca reestructurarse y con todo este ruido le será más difícil de conseguirlo. Los motivos se entienden, el problema es el momento en que llegan estos reproches.
Claro que Zidane tiene la potestad de quejarse; más al ver como despotricaban algunos medios sobre su forma de irse, una vez más. La cosa es que el francés también tendría que haber hecho algo de autorcrítica, pues dejó pruebas de que lo deberían haber sacado. El juego del equipo fue muy irregular en todo el curso; el equipo no se sabe a lo que juega; la plantilla quedó muy mermada por sus malas decisiones, algo que aumentó en invierno al dejar salir a más hombres; y finalmente, los resultados acabaron por dejarlo sin levantar ningún trofeo. Sin embargo, pese a todos esto, tanto el madridismo como Florentino Pérez abogaron por su continuidad; pero el estratega galo ya parece que había tomado la decisión hace tiempo. Aún con eso decidió irse y varios medios se volcaron en su contra; por eso rompió el silencio con esa carta.
Una carta abierta que duele mucho
Lo que queda más que claro en esta carta que se publicó en ‘As’ es que el motivo de Zidane para dejarlo es que le falto sentir ese cariño y confianza por parte de Florentino Pérez; pero más que nada de esa parte noble del club merengue. «Me voy porque siento que el club ya no me da la confianza que necesito, no me ofrece el apoyo para construir algo a medio o largo plazo. Conozco el fútbol y conozco la exigencia de un club como el Madrid, sé que cuando no ganas te tienes que ir. Pero aquí se ha olvidado una cosa muy importante, se ha olvidado todo lo que he construido en el día a día, lo que he aportado en la relación con los jugadores, con las ciento cincuenta personas que trabajan con y alrededor del equipo», comentó el francés en su carta.
Otro de los reproches que más se hizo sentir que más polémica ha generado es en el que Zidane explicó que eran esas noticias de la prensa en las que se le ponía fecha de caducidad a su estancia en el club, las que le dolían. Eran esas informaciones las que se filtraban de la zona noble del club merengue y que no le hacían nada de gracia. «Me dolía muchísimo cuando leía en la prensa, después de una derrota, que me iban a echar si no ganaba el siguiente partido. Me dolía a mí y a todo el equipo porque estos mensajes filtrados intencionalmente a los medios de comunicación creaban interferencias negativas con la plantilla, creaban dudas y malentendidos«, acotó el entrenador galo. Aunque también destacó que se mantuvo firme por sus jugadores que siempre lo ayudaron con grandes victorias en estos momentos que era cuestionado.
Zidane decidió irse con polémica
Al analizar la carta claro que se entiende el enfado de Zidane; más por lo que se estaba hablando en muchos medios y en programas deportivos de opinión, en los que a su entender se estaban diciendo mentiras o inventando escenarios de su posible adiós. El problema está en la forma en la que lo hace, pues con esa misiva lo único que hizo fue echarle más sal a la herida, una que ya estaba bien abierta precisamente por su adiós prematuro, una vez más. Obviamente que con sus palabras no va resquebrajar ni su relación con Florentino Pérez, que lo aprecia demasiado, ni con la afición madridista, que lo idolatra por todo lo que ha hecho; pero si que abre una brecha con los periodistas, con algunos dirigentes del club y por supuesto que le supone un dolor de cabeza más que innecesario al mandatario blanco.
Cierto que en varias ocasiones se llegó a decir que si Zidane perdía lo echaban, una de las que se hizo eco la prensa fue antes del duelo contra el Alavés en enero. Para el entrenador francés todas estas noticias las esparcían varios dirigentes del Madrid y allí es que va la «puyita» para Florentino Pérez, pues en ninguna de esas ocasiones lo defendió ni de puertas para fuera ni tampoco internamente contra esos dirigentes que filtraban las noticias. Los reproches de Zidane son más que válidos, pero llegan en un momento en el que el mandatario se debe concentrar para fichar a Mbappé; resolver todo el asunto de la Superliga de Europa con la UEFA y la posible sanción que se viene; y además de eso reformar un equipo con más fichajes y todas las salidas que hacen falta. La polémica ya está ahora falta ver como sigue.