El microondas es uno de los grandes inventos que nos facilitan la vida en la cocina. Calentar la comida es una cuestión de segundos, resulta muy cómodo y limpio, pero…¿también seguro? La verdad es que es bueno que seamos conscientes de los riesgos que entraña el empleo del microondas, especialmente combinado con uno de las mayores lacras para el medio ambiente en este siglo XXI como son los plásticos.
4El plástico sometido a una fuente de calor como el microondas suelta moléculas peligrosas para el organismo
Es cierto que son muchos los fabricantes que se han decidido tras estas comprobaciones al uso de plásticos libres de bisfenol. Pero hay estudios que demuestran que hasta los plásticos que no lo contienen, al ser sometidos a una fuente de calor, pueden llegar a soltar diferentes tipos de moléculas que también funcionan como disruptores endocrinos.
En general, la solución pasa por utilizar recipientes que especifiquen que son aptos para el microondas. Pero la mejor alternativa es emplear para calentar recipientes de loza o cristal que no sueltan este tipo de elementos químicos.
Lo mismo se puede decir del film que se suele utilizar para proteger los alimentos cuando los introducimos en el microondas. La mejor opción es seleccionar siempre un tipo de papel que indique que es apto para ese fin.