Durante la celebración del Atlético de Madrid toda la atención se la llevaron los jugadores; pero algunas de las Wags, como Beatriz Espejel, sorprendieron a muchos con su impresionante belleza. Claro que conquistar el título de LaLiga Santander supuso un gran logro y la algarabía recorrió a todos los jugadores y fanáticos rojiblancos; sin embargo, el entusiasmo se elevó cuando algunas de las parejas de los jugadores aparecieron sobre el césped para celebrar junto a ellos por su impresionante gesta y claro que la esposa de Koke Resurrección fue una de las que más revuelo causó, pues su hermosura no pasó desapercibida para nadie.
Claro que algunas como Patriacia Noarbe, mejor conocida como «Paddy», pareja de Marcos Llorente, suelen captar miradas por sus prominentes curvas y ese erotismo que las caracteriza; pero eso no quita que otras como Beatriz Espejel también se llevarán muchos halagos. Desde hace mucho la madrileña viene destacando en las redes sociales gracias a sus publicaciones muy apegadas a la moda y a la belleza; algo que le ha generado una buena cantidad de seguidores. Con varias marcas queriendo promocionarse con ella, y otras tantas que ya lo hacen, ya resalta como toda una celebridad; además con sus posados de escándalo, en los que enseña su hermosura, siempre deja un buen sabor de boca a sus admiradores.
4Demasiado estilo y clase en un solo ser
El estilo y la clase de una modelo no solo se muestran con un tipo de vestimenta específico; porque la verdadera magia de muchas modelos está hacer que con cualquier atuendo logren verse geniales. Ese es el caso de Beatriz Espejel, pues cuando muchos piensan que no puede haber nada mejor que ella en un hermoso vestido, todo se ilumina cuando aparece también con uno corto; esto debido a que su belleza y encanto lo hacen más que especial a la vista. En esta imagen queda más que claro al verla con un vestido corto de color amarillo que le luce muy bien; pero todo se completa es gracias a esas botas que combinan perfecto con su atuendo y a esa belleza que tiene su rostro digna de una postal. Tanta hermosura hay veces que parece imposible que existiera.