La apnea es un trastorno del sueño, catalogado como «potencialmente grave» en que la respiración se detiene y recomienza repetidas veces.
Es decir que la apnea, es básicamente una patología respiratoria que se caracteriza porque las personas que lo padecen, roncan habitualmente. Es decir que padecen «paradas» de la respiración de forma repetida y somnolencia durante el día.
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Tras padecer apnea, las personas no logran descansar el tiempo necesario durante las horas correspondientes del sueño.
La mayoría de las personas que padece el trastorno, durante la noche tienen un colapso de la faringe. Este colapso tiende a ser periódico, especialmente en algunas fases del sueño como el REM.
En caso que el número de apnea exceda el determinado por hora, significa que la persona padece de apnea obstructiva del sueño.
Tipos de apnea
Los principales tipos de apnea del sueño son los siguientes:
- Apnea obstructiva del sueño. Esta es la básica y ocurre cuando los músculos de la garganta se relajan
- Apnea central del sueño. Hace presencia cuando el cerebro no envía señales correctas a los músculos que controlan la respiración
- Síndrome de apnea del sueño compleja. También denominado apnea central del sueño emergente del tratamiento, que ocurre cuando alguien tiene apnea obstructiva del sueño y apnea central del sueño.
¿Cuáles son las causas de la apnea?
A modo general, cuando algunas fases del sueño los tejidos se cierran y bloquean la vía respiratoria, da el paso a la apnea.
Causas de la apnea obstructiva del sueño
La apnea obstructiva del sueño se hace presente cuando los músculos en la parte posterior de la garganta se relajan. Estos músculos son conocidos por sostener el paladar blando, la porción triangular de tejido que cuelga del paladar blando, amígdalas, las paredes laterales de la garganta y la lengua.
Justo cuando los músculos se relajan, las vías aéreas se estrechan o se cierran cuando se respira. La persona que lo padece, no puede recibir suficiente aire, así que en consecuencia puede bajar el nivel de oxígeno en sangre.
Cuando el cerebro detecta que no hay respiración, automáticamente hace que despiertes para que puedas abrir las vías aéreas. El despertar es breve, así que la gran parte de las personas no lo recuerda. En este transcurso, la persona podría resoplar, ahogarse o jadear.
Un proceso que puede repetirse durante 5 a 30 veces cada hora durante toda la noche. Por lo que no hay manera en que logres descansar correctamente.
Apnea central del sueño
Mientras que la apnea central del sueño se hace presente cuando el cerebro deja de transmitir señales a los músculos de la respiración. Esto significa que la persona que lo padece , no hace esfuerzo para respirar durante un período breve de tiempo. Así que es probable que la persona tenga dificultad para respirar y le cueste retomar el sueño.
Además, existen otros factores que pueden aumentar el riesgo de tener apnea:
- Tener el maxilar inferior más corto que el maxilar superior.
- Determinadas formas del paladar o de la vía respiratoria que origina el colapso de la vía.
- Tener un cuello grande.
- Poseer una lengua que puede retrotraerse hasta bloquear la vía respiratoria.
- La obesidad.
- Tener unas amígdalas o vegetaciones grandes que pueden taponar la vía respiratoria.
¿Cómo saber que tengo un trastorno de sueño?
Los síntomas para detectar que padeces apnea del sueño son los siguientes.
Los signos y síntomas más comunes de la apnea obstructiva y la apnea central del sueño incluyen los siguientes:
- Ronquidos fuertes
- Episodios en los que dejas de respirar durante el sueño (lo cual señala otra persona)
- Jadeos al respirar durante el sueño
- Despertarse con la boca seca
- Dolor de cabeza por la mañana
- Problemas para mantenerse dormido (insomnio)
- Sensación de sueño excesiva durante el día (hipersomnia).
- Dificultad para prestar atención mientras estás despierto
- Irritabilidad
Los ronquidos son la manifestación más visible que puede dar la alerta de la apnea del sueño. Cuando una persona comienza a padecer dicho trastorno, comienza a roncar muy fuerte después de quedarse dormidos.
El sueño es interrumpido durante un periodo de silencio mientras el paciente sufre una apnea. Ese periodo de silencio va seguido de un resoplido y jadeo mientras el paciente intenta volver a respirar.
Si padece de alguno de estos síntomas puede acudir al médico para que haga un diagnóstico y le indique cuál es la mejor opción.
Consejos para descansar durante toda la noche
Trata de que tu espacio para descansar esté cómodo, tenga la ventilación necesaria y esté fresco. Muchas veces la incomodidad puede hacer que el dormir sea breve, intenta incluso usar ropa ligera que no te moleste en el descanso.
Previo, puedes adoptar una rutina para relajarte al acostarte. Bebe una taza de té de tu preferencia sin cafeína, toma un baño caliente, escucha música relajante y utiliza inciensos. Todo de manera que el cuerpo se sienta relajado y dispuesto al descanso.
Puedes realizar yoga o una relajación sencilla muscular para que puedas aliviar tensiones y ayudes a los músculos que se tensan, entren en una fase de relajación total.
Mantén la luz, el ruido y la temperatura en niveles agradables que no alteren tu descanso. Evita jugar con los niños o con las mascotas en la habitación de manera que el cuerpo sepa que este lugar es solo para descansar.