Tanto iOS como Android se llevan el protagonismo en el gusto de los fanáticos que buscan un buen sistema operativo. Para el caso de los videojuegos, ya a estas alturas hay muchísimos avances que han puesto a valer a los móviles muy por encima de las consolas portátiles. Y que, no es necesario que exista una dependencia a la consola. Con el simple hecho de apuntarse al teléfono, es posible tener una experiencia gratificante a la hora de sumar un título.
De hecho, mientras más avanzan los móviles, el rendimiento suele ser mayor y más atractivo para las personas. Si bien es cierto que, el universo de los videojuegos no se ha quedado rezagado, en el tema de los costos para el público, ha implicado que con el teléfono sea más sencillo aprovechar juegos de calidad sin necesidad de tener la consola. Todo esto debido a la adaptabilidad a estos sistemas electrónicos que la gente siempre usa.
3Una estrategia donde prima lo que es gratuito
Una de las grandes discordias que suelen tener los gamers en contra de los fabricantes es cuando traen al mercado videojuegos muy novedosos. Pero no llegan con la etiqueta de gratis sino que han de pagar. Algunos sí lo hacen, pues vale decir que, cuando un fanático aprecia su título, de alguna manera lo va a querer tener consigo.
Sin embargo, este comportamiento no siempre es así. Gran parte de los usuarios, prefieren irse a su tienda y descargar lo que no tiene costo desde su móvil (y sin complicación alguna). Además que, el privilegio de tener consolas ya sabemos que pasa por un asunto de inversión.
Es más factible un móvil que ofrece un ecosistema de funciones a lo que es propiamente la consola. Pues, esta pasa por un capricho que implica mayores gastos para adquirirla y ampliar el catálogo de juegos.