El fiscal ha elevado a definitiva su petición de cuatro años y medio de cárcel y una multa de 36.000 euros para Francisco Gómez Iglesias, conocido como ‘Pequeño Nicolás’, como inductor y cooperador necesario en la falsificación de su DNI para que un amigo pudiera suplirle en la selectividad de 2012.
Durante la última sesión del juicio por estos hechos, el representante del Ministerio Público ha interesado igualmente penas de prisión y multa para los otros dos acusados, que son el joven que presuntamente hizo el examen en sustitución de Gómez Iglesias, Manuel Avelló, y la funcionaria de la comisaría de Tetuán que elaboró el DNI que resultó falso.
Se pide para ellos también cuatro años de prisión y multa e igualmente se solicitan penas de prisión para los tres acusados las acusaciones populares ejercidas por Podemos y una asociación de policía municipal.
Según la Fiscalía, los hechos que entiende delictivos precisaron la intervención de varias personas.La participación de Gómez Iglesias y de su amigo la tiene por acreditada por las declaraciones que realizaron en su día los compañeros de instituto del Pequeño Nicolás, con independencia de que, con una excepción, la mayoría de ellos se limitara a señalar en el juicio que los hechos ocurrieron ya hace ocho años y no los recordaban claramente.
Para el fiscal, también tiene especial importancia el hecho de que el Pequeño Nicolás sacara en el examen dos puntos y medio más que su media en Bachillerato, y que la nota obtenida, un 8,25 fuera muy similar al 9 que su amigo Avelló sacó en la convocatoria de junio, ya que el fraude se produjo en la de septiembre.
El informe del fiscal, no obstante, se ha centrado en la actuación de la funcionaria, en la que ve una clara «connivencia de hecho» con los planes del Pequeño Nicolás, pese a no poder demostrarse una connivencia directa o conocimiento entre ambos. En este punto, ha subrayado el hecho de que Gómez Iglesias se vanagloriara en público de tener «amigos comisarios de la Policía».
Pese a reconocer ciertas contradicciones entre los testigos sobre el sistema que se empleaba en 2012 cuando en la expedición de un DNI por extravío se cambia la foto, como es el caso, el Fiscal destaca para acusar a esta persona el hecho de no se guardara el talón foto, como declaró un oficial de Policía dijo que debería haberse hecho. Ha calificado de «absurdo» que se quiera mantener el argumento de que el sistema no asegure que queda constancia del cambio de fotografía en un documento nacional de identidad.
«No revisó a conciencia la foto aportada cuando el DNI se hacía dos días después haberse expedido el anterior y además se cambiaba la foto y la firma, y además no dejó constancia de ninguna forma de estos cambios, ni en el programa informático ni por talón», ha explicado el fiscal. Ha añadido que, al no quedar esta constancia, el delito de falsedad habría quedado impune si una periodista (Patricia López, de público) no hubiera aportado el documento falso años después.