El Gobierno de Reino Unido ha instado este lunes a las aerolíneas británicas a evitar el espacio aéreo bielorruso tras el «desvío forzado» de un avión de Ryanair el domingo.
El ministro de Transporte, Grant Shapps, ha anunciado en Twitter que ya se ha puesto en contacto con la Autoridad de Aviación Civil de Reino Unido para que «pida a las aerolíneas que eviten el espacio aéreo bielorruso con vistas mantener a los pasajeros seguros».
Además, ha anulado el permiso a la aerolínea nacional bielorrusa Belavia para operar en Reino Unido, en represalia al incidente ocurrido el domingo y que se saldó con la detención de un periodista crítico con el Gobierno de Alexander Lukashenko, Roman Protasevich, que viajaba a bordo del avión interceptado.
El ministro de Exteriores de Reino Unido, Dominic Raab, ya se había pronunciado previamente, reclamando que Lukashenko «sea llevado ante la Justicia» por sus «estrambóticas» acciones. Ha solicitado la «puesta en libertad inmediata de Protasevich y otros presos políticos» que siguen encarcelados en Bielorrusia.
Así, ha especificado que Reino Unido «se encuentra trabajando con los aliados de forma coordinada para tomar medidas conjuntas», por lo que no ha descartado la posibilidad de imponer una nueva batería de sanciones contra Minsk. «Estas acciones de Lukashenko tendrán graves consecuencias», ha dicho en un mensaje difundido a través de su cuenta de Twitter.
En este sentido, ha indicado que el consejo de la Organización Internacional de Aviación Civil debería reunirse de forma «urgente» para considerar la posible violación por parte del Gobierno de Lukashenko de la «normativa internacional para salvaguardar la aviación civil.