Tu rodilla tiene dos meniscos. Estas estructuras de cartílago en forma de media luna amortiguan el espacio entre los dos huesos. Puede existir rotura de menisco si se tuerce la rodilla durante un deporte o debido al deterioro relacionado con la edad.
¿QUÉ ES EL MENISCO?
El menisco son dos piezas en forma de C de cartílago gomoso en la rodilla que encajan entre el fémur (hueso del muslo) y la tibia (hueso brillante). El menisco actúa como amortiguador y parachoques dentro de la articulación de la rodilla.
Permiten que la articulación de la rodilla se deslice suavemente y distribuya las fuerzas dentro de la rodilla durante actividades como caminar, correr y saltar.
CAUSAS Y SÍNTOMAS DE LA ROTURA DE MENISCO
Las roturas de menisco vienen en diferentes formas y tamaños, y pueden ocurrir por una variedad de razones. Muchas veces ocurren como resultado de un trauma específico, como aterrizar torpemente de un salto o ser tacleado en el fútbol.
Otros desgarros ocurren con el tiempo como resultado de la degeneración (desgaste) del cartílago. En general, hay cinco tipos comunes de desgarros: colgajo, radial, vertical, asa de cubo y degenerativo. Cada tipo tiene su propio conjunto de causas y opciones de tratamiento.
En los casos de desgarros traumáticos, el paciente a menudo experimenta una sensación de estallido aguda en la rodilla seguida de dolor e hinchazón. En los casos de desgarros degenerativos, los pacientes a veces experimentarán la aparición lenta de los síntomas.
Cuando una rotura de menisco es sintomático, un paciente puede experimentar dolor, hinchazón y / o síntomas mecánicos (chasquido, agarrotamiento y / o bloqueo de la rodilla).
Es importante comprender que cada paciente es diferente y que los síntomas enumerados anteriormente no siempre significan que la persona tiene rotura de menisco. Un cirujano ortopédico debe realizar un diagnóstico para asegurarse de que la lesión se trate adecuadamente.
Los desgarros meniscales repentinos generalmente ocurren en los deportes, a menudo por torcer la rodilla o por fuerzas de contacto como un tackle.
El trauma también puede causar un menisco desgarrado. A medida que envejece, su tejido meniscal se deteriora, haciéndolo menos flexible y propenso a desgarrarse. Las personas mayores pueden romperse el menisco al torcerse accidentalmente una rodilla al estar de pie o al caminar.
Si tienes rotura de menisco, notarás síntomas como:
- Un chasquido cuando el menisco se rompe.
- Dolor que varía de leve a severo.
- Hinchazón, rigidez o debilidad de las articulaciones.
- Empeoramiento de los síntomas con el tiempo.
- Tu rodilla cedió al intentar caminar.
DIAGNÓSTICO Y EXAMEN
El diagnóstico se basa en el historial del paciente, el examen físico y las imágenes (como radiografías y / o resonancia magnética). Una rotura de menisco a menudo se puede diagnosticar mediante un examen físico.
La prueba de McMurray se usa para detectar rotura de menisco y, a menudo, causa dolor y chasquidos cuando se realiza. Los hallazgos adicionales del examen incluyen hinchazón, dolor con la amplitud de movimiento y sensibilidad en la línea de la articulación.
En la mayoría de los casos, las radiografías de la rodilla parecerán normales. Si existe una preocupación por un desgarro de menisco u otra lesión de rodilla, generalmente se realiza una resonancia magnética.
Se puede usar una resonancia magnética para determinar el tamaño y la forma de un desgarro, así como para buscar otras lesiones de rodilla, como desgarros de cartílago o ligamentos.
TRATAMIENTO CONFIABLE DE ROTURA DE MENISCO
Cuando acudas a los especialistas en ortopedia para un tratamiento de rotura de menisco, determinarán la gravedad de la lesión y crearán un plan de tratamiento personalizado. Un desgarro leve puede requerir medicación, hielo y reposo, mientras que un daño más grave puede requerir cirugía.
El tiempo de recuperación de la rotura de menisco depende de tu lesión y del plan de tratamiento. Si te sometes a una cirugía, es probable que los proveedores te recomienden una rodillera y eviten cargar peso en la pierna.
TIPOS DE ROTURA DE MENISCO
El menisco es una estructura en forma de C que se encuentra dentro de la articulación de la rodilla. Existen diferentes tipos de desgarros de menisco y, por lo general, el tipo de desgarro se puede determinar con una resonancia magnética de rodilla. A continuación se describen los tipos comunes de desgarros de menisco.
- Desgarro radial: los desgarros radiales del menisco son los más comunes. Estos aparecen como pequeños desgarros en la parte interna del menisco. Estos desgarros ocurren en la parte avascular del menisco (donde no hay irrigación sanguínea) y, como resultado, tienen poca capacidad para curarse por sí solos.
- Desgarro de colgajo: los desgarros de colgajo del menisco (a veces conocido como desgarro del pico de un loro) también suelen ocurrir en la parte avascular del menisco. A menudo pueden causar síntomas mecánicos, como engancharse y bloquearse, ya que pueden voltearse dentro y fuera de su posición.
- Desgarro vertical: los desgarros verticales del menisco (a veces conocidos como desgarros longitudinales) son desgarros que se desarrollan a lo largo de la curva circular del tejido del menisco. Cuando estos desgarros crecen lo suficiente, a veces pueden desplazarse hacia la parte delantera de la rodilla y luego se conocen como desgarros en forma de cubo.
TRATAMIENTO NO QUIRÚRGICO PARA LOS DESGARROS DE MENISCO
La cirugía no es necesaria en todos los pacientes con desgarro de menisco. Tu cirujano tomará en consideración el tipo de lágrima, así como tus necesidades específicas de estilo de vida cuando determine la mejor opción de tratamiento. El tratamiento no quirúrgico a menudo incluye un período de descanso seguido de un curso de fisioterapia.