El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, ha subryado que la gestión de los 140.000 millones de euros que la Unión Europea inyectará en España en los próximos años para acelerar la reactivación de la economía tras la pandemia de la Covid-19, suponen un «desafío» y una «gran oportunidad» para transformar la economía española e impulsar su recuperación.
«El Plan de Recuperación supone uno de los impulsos económicos y sociales más importantes de nuestra historia y también, uno de nuestros mayores desafíos. Aspiramos a recuperar, modernizar y transformar nuestra economía en clave verde, digital, inclusiva y social», ha asegurado Ábalos durante su participación, a través de un vídeo, en la Jornada de seguimiento de los fondos Next Generation UE, organizada por el Colegio de Ingenieros de Caminos.
El ministro ha enfatizado que con las inversiones previstas en el Ministerio que dirige se busca generar cerca de medio millón de empleos e implementar en unos 34.000 millones de euros el PIB.
En este sentido, el secretario de Estado de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Pedro Saura, ha reiterado durante su intervención en la jornada que el Plan de Recuperación es el esfuerzo más ambicioso, completo e integral que se ha aportado a la economía española en su historia moderna.
Así, la correcta implementación del Plan, ha aseverado Saura, «va a permitir que España entre en una senda de crecimiento de entre el 4% y el 6% en los próximos años». No en vano, el programa está diseñado para canalizar los recursos a todo el tejido productivo en inversiones que, por sus componentes de descarbonización y transformación digital, supondrán una reingeniería e industrialización del sector, aportando un mayor valor añadido a la economía.
16.000 MILLONES PARA DESCARBONIZAR EL TRANSPORTE
Durante su intervención, Ábalos ha señalado el importante papel del Ministerio de Transporte en la gestión de los fondos europeos, ya que contempla proyectos de inversiones y reformas en el que se gestionan más de 16.000 millones de euros para descarbonizar el sector del transporte y la edificación, además de para generar valor agregado a través del impulso de la digitalización y la innovación.
Entre las inversiones previstas, el secretario general de Infraestructuras, Sergio Vázquez, ha destacado durante la clausura del evento que el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana tiene previsto destinar unos 7.600 millones de los fondos Next Generation EU en impulsar una movilidad «sostenible, segura y conectada» con la mirada puesta en el ferrocarril como una de las principales palancas para lograr la descarbonización del transporte.
Entre otras cosas, busca completar los corredores europeos en España y acelerar el trasvase modal de la carretera al tren, especialmente en mercancías, para reducir la dependencia del petróleo y las emisiones. No en vano, el sector del transporte genera un 27% de los gases de efecto invernadero. Los 7.600 millones están recogidos en las componente 1 y 6 de Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia y corresponden a inversiones directas que el grupo Mitma va a realizar en los próximos tres años a través de Adif, DGC, ENAIRE, Puestos del Estado y Renfe.
VIVIENDA
En cuanto a las actuaciones en vivienda y regeneración urbana con casi 7.000 millones de euros, la segunda mayor del Plan, el Ministerio busca mejorar la sostenibilidad y calidad de vida en las ciudades y ofrecer un verdadero horizonte de actividad y empleo equilibrados al sector.
En este punto, Iñaqui Carnicero, director general de Agenda Urbana y Arquitectura, ha afirmado que «la rehabilitación es un sector clave para reactivar la economía» por lo que, con cargo al Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR), se ha diseñado un plan de impulso a la rehabilitación de edificios públicos, que busca, en el marco de implementación de la Agenda Urbana, cumplir los principios clave de la Renovation Wave.
Estos son la eficiencia energética, la descarbonización e integración de renovables; el ciclo de vida y circularidad; la transición ecológica y digital, la apuesta por la vivienda en alquiler social en edificios energéticamente eficientes, y el respeto por la estética y calidad arquitectónica.