El socarrat o lo amas o lo detestas: no hay término medio con él. La zona de arroz más cercana a la paella, la que se suele quedar algo más tostada que el resto, suele ser objeto de controversia entre los amantes del plato más famoso de la gastronomía española.
Hay quienes aseguran que este chamuscado es una abominación, algo incomible; pero otros, los que se las dan de entendidos en esto de las paellas, dicen que es un caprice des dieux, un bocado de cielo puesto en la tierra en forma de arroz quemado. Eso sí: ¡ha de ser un buen socarrat! No es sencillo conseguir uno realmente bueno, pero hoy en QUÉ! vamos a darte los mejores consejos para lograrlo.
5NO TOQUES EL ARROZ DE LA PAELLA
Es una de las reglas principales y es común para todos los amantes de la paella, ya sean de la ‘religión’ del socarrat o no: el arroz no se toca. Ningún maestro se precie marea el arroz. Una vez eches el caldo en la paella, que debe echarse caliente y de golpe, dale un toque para que todo esté bien repartido y lo más plano posible para que se reparta bien el calor.
Se supone que a partir de aquí no se ha de mover el arroz nada más, pues hacerlo romperá la capa de calor del plato y hará que el sabor no sea uniforme. Especialmente en la parte inferior, de donde queremos sacar nuestro estimado socarrat.