La Guardia Urbana de Barcelona, en actuaciones conjuntas con los Mossos d’Esquadra, ha desalojado a 9.055 personas desde las 22.00 horas del sábado hasta las 6.00 del domingo por formar aglomeraciones en espacios públicos de la ciudad, han informado fuentes municipales a Europa Press.
La playa de Sant Miquel ha sido «el punto de máxima concentración», donde se han desalojado 2.000 personas y se las ha redireccionado hacia el paseo Joan de Borbó por el lado del mar para evitar que accedieran de nuevo a las calles de la Barceloneta y evitar ruidos vecinales.
El paseo del Born y el de Lluís Companys han sido otros dos espacios de concentración masiva de personas que incumplían las medidas de seguridad, que «han sido desalojados sin incidentes».
Urbana y Mossos también han inspeccionado y cerrado tres locales por incumplir el horario de apertura, permitido hasta las 23.00 horas.
Este es el segundo fin de semana sin toque de queda en Catalunya tras finalizar el 9 de mayo el estado de alarma decretado el 25 de octubre de 2020 para frenar los contagios de coronavirus.